El Amor Ágape

©  Cira Arroyo Fuentes 

     De que vale entregarse de todo corazón, con Amor Ágape a los demás, dándole obras recién salidas del horno de Dios, si estas no son escuchadas porque no nos dan importancia, no somos valorados ni nos seden espacio para nada en un mundo en que no es aceptada la presencia verdadera de este amor.

Un mundo en el que le dan valor a muchas otras cosas y creencias, menos a la Verdad Absoluta, que está implícita en este amor, que es perfecta en todo tiempo, en que por causa de la corrupción que existe en todo lugar y en todo nivel lo que predomina es salir adelante y surgir con personalidades falsas, brochazos interesados y argollas.

Un mundo donde todo lo que tiene conexión con lo mundano, corrupto y aventurero es a lo que le dan importancia y está determinado por estados de clases sociales, profesionalismo, materialismo, ocultismo y diversificación de personalidades con su particular manera de vida libre, a la que demandan respeto y son estas formas de vivir las que son más tomadas en cuenta, sea que tengan raíces y esencia de creatividad u originalidad o simplemente sean formas de vida o de ser que son una copia exacta o parecida a cualquier experiencia que haya tenido alguna persona que ha vivido plenamente a sus anchas y que ha querido dejar bien marcada su huella en el tiempo para ser recordada por todos siempre, de generación en generación a través del tiempo.

Para que dejar todo nuestro ser innato que continuamente está siendo moldeado por este Amor Ágape en lugares vacíos, huecos, fríos, que son como una piedra, en que a lo malo lo ven como bueno y a lo bueno malo, en donde le dan más importancia a lo  terrenal que a lo espiritual.

Las perlas preciosas las debemos dar a quienes las reciben con amor, las agradecen y las aprecian, pero no debemos desperdiciarlas con quienes las ignoran o no les dan importancia. No hemos de dárselas, porque lo que hacen con ellas es botarlas a la basura para que no den fruto.

Todo ese amor ágape que llevamos en nuestro interior quienes lo hemos con humildad aceptado, es para alumbrar los lugares oscuros que se dejan iluminar y ayudar, pero en donde se han conformado con la oscuridad o una media luz, que por preferir permanecer en ese estado nos cierran las puertas disimuladamente, evitándonos o evadiéndonos con comportamientos y sonrisas fingidas, como creyéndose que todo lo saben, mirándose unos a otros de reojo, con gran disimulo, hablándonos con hipocresía de una manera superficial, sólo porque no se diga, debemos apartarnos para no convertirnos como ellos.

Debemos tener la autoestima que Dios nos ha dado y no permitir que al Amor Ágape que Él nos da para que lo demos a los demás no nos lo desprecien y peor aún, que viéndonos a los que lo tenemos, como con cara de tontos o ignorantes, los que se creen mucho, nos lo pisoteen dándole más importancia a todo lo que se inclina a lo placentero, sin límites, neutro, frío, calculador, que ni siquiera se le logra que se llene de tibieza, porque tiene congelado como una piedra su corazón o va en camino de eso.

No tenemos por qué tolerar u obligarnos a permanecer en un ambiente así porque hay muchos sitios  con personas sedientas de esta clase de amor, que si merecen que se lo demos porque lo van a dejar vivir en ellas para que les de fruto.

Cambiar la mira para otro lugar en donde dar este amor es todo lo que tenemos que hacer, buscar ambientes nuevos donde sembrar su semilla, para que crezca y de abundantes cosechas.

Sólo Dios sabe cuántas personas se están perdiendo de la presencia de este amor, que padecen una total ausencia de él, que se lo desean para sembrarlo en sus terrenos que sí son fértiles, pero quienes tienen las semillas y pueden dárselas no se las dan por andar perdiendo su tiempo en terrenos secos, baldíos, en dónde por más que traten de sembrar la semilla de este amor perfecto, ella no crece porque es una tierra que tiene un velo que la ciega y no le permite doblegar su orgullo mundano para aceptar todo lo que el amor real y verdadero, o sea lo que Él Amor Ágape le quiere enseñar con equidad.

Qué lástima que en todo lo que El Verdadero Amor Ágape tiene presencia, que se da por entero, por el bien de los más necesitados, siempre se cola el egoísmo y la ausencia de manos, corazones y mentes dispuestas a recibirlo, porque lo hacen todo al revés cuando se cierran sus manos al querer liberarse, nutrirse y sobresalir solo ellas haciéndolo a su manera, acaparando todo sólo para unos cuantos, en lugar de tener manos abiertas, que estén en completa disposición de aceptar a este amor, que es el trasfondo que ha hecho que todo se de y ocurra en igualdad para todos.

El problema es que cuando los privilegios sólo existen para unos y no para todos, y peor aún, cuando se les dan a quienes menos los necesitan, todo marcha mal, porque no es el orgulloso exhibicionismo de unos cuántos lo que se debe dar en todo lugar, sino la participación en igualdad y humildad por parte de todos.

Y cuando el tiempo sobra para escuchar a unos, pero falta para otros, el ambiente se torna aburrido, seco, porque con muy pocas gotas de agua no se riega ningún terreno, sino que se necesitan muchas para que la tierra quede bien mojada y puedan nacer toda clase de semillas, para que cuando se llegue el tiempo de recoger la cosecha esta de de todo y nos quedemos con los frutos sanos y desechemos los malos, pero si al Amor Ágape se le rechaza, le cierran las puertas y no se le permite ser sembrado, no se podrá nunca sacar buenos frutos de la cosecha y por ende éste cambiará de rumbo para irse a sitios en donde si se le deje ser y sea tomado en cuenta.

Lo único cierto es que nadie valora lo que tiene mientras lo tiene presente, porque la rutina hace que no le de importancia y se aburra de eso, y de tanto decir NO, por eso, un cambio de rumbo en situaciones así siempre es necesario, porque el sentir de corazón el dolor de la ausencia de algo que estábamos acostumbrados a tener, pero que encontrábamos empalagoso o sin valor, a lo que nos esforzábamos con todos nuestros sentidos para no permitirle entrar en nuestro ser, por habernos conformado a un sistema tradicionalista de vida que nos motivaba a no darle ninguna importancia,  es lo que en muchas ocasiones debe cortarse bruscamente, porque es la única salida para que las personas reaccionen y se den cuenta de lo que han despreciado, debido a que hay muchas personas que no valoran algo hasta que lo pierden.