jueves, 23 de mayo de 2019

El escritor es responsable de sus obras ante Dios

un escrito desenfrenado, lleno de sexo, diábólico puede llevar a muchos a la perdición aunque ya el escritor haya cambiado y se haya salido de esa vida porque los escritos y los libros una vez escritos y compartidos toman vida propia.

Lastimosamente son muchos los escritos, los mensajes y los libros o las obras malas que muchas personas han hecho que promueven destrucción y que están esparcidos por el mundo con el peligro de destruir una, varias o muchas vidas y sumergirlas en el mundo de destrucción que vivió o promovio el creador del libro o del escrito según su vida.

Cuando una persona lee un libro que promueve destrucción y se siente cautivada por este, corre el gran peligro de que esa mala semilla que busca sembrar el escritor de ese libro, penetre y se siembre en su vida para que se convierta en un servidor del mal, que propague maldad también.

libros de magia, astrología, de sexo, de lesbianismo, de todo hay en el mercado al alcance de la mano de quienes aún tienen un velo puesto y no han conocido al Señor, que peligran ser contaminados con estos materiales que van en contra de la Voluntad de Dios.

puede que muchos se salven y no sean afectados por este tipo de literatura, pero muchos otros no y sí se ven sumamente afectados y cambian sus vidas a la manera de que ese escritor mundano y loco por corrupción y vicios y desenfreno sexual, creyencero etc escribió muchas veces bajo el efecto de drogas o licor

Cada escritor es responsable de lo que escribe ante Dios, El Creador, Ser Supremo o como quieran llamarle al único creador de todo lo que existe.

Decide en libre albedrío en que bando estar: en los que construyen al mundo o los que lo destruyen.


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