martes, 28 de abril de 2020

La vida casera es más económica que la vida callejera

Por Cira Arroyo Fuentes   28/04/2020   9:42 PM

     La actitud que tenemos ante la vida y sus cambios define nuestro estado de ánimo y nuestra paz.

Si aprendemos con Dios a nadar dejándonos llevar por la corriente y a flotar sabiendo que Él nos lleva cargados en sus brazos, todo se nos hace más fácil y no nos complicamos  por nada, simplemente nos amoldamos a vivir con lo que tenemos y podemos.

Cuando uno es humilde y tiene los pies bien puestos sobre la tierra, sabe que no nació con nada incorporado, que desnudos vinimos a este mundo y desnudos nos vamos porque nada podemos llevarnos y que lo único que podemos atesorar son las riquezas espirituales y la llenura
del Espíritu de Dios, si es que lo hemos con humildad aceptado como Rey, Señor y Espíritu Guíador de nuestra vida.

Mientras estemos vivos, esto es lo único en que debemos no preocuparnos sino ocuparnos, que es de nuestra vida espiritual más que la corporal, para cumplir el propósito de Dios en nuestra vida y todo lo demás que necesitemos para vivir en este mundo, Dios nos lo da por añadidura.

Ahora con este confinamiento por este virus, veo a mucha gente como desesperada para que abran los gimnacios, salones de belleza, cines, teatros, salones de baile, bares, estadios, etc, como si hubiesen nacido con esas actividades de vida incorporadas y muchas se han sentido frustradas, con depresión, estrés, etc, como si el mundo se les hubiera acabado, por no poder ir a esos lugares.

Muchas personas se cierran y no hacen por dónde ver como se adaptan a la situación, buscando alternativas de desapego a esa vida de calle que acostumbraban antes, que ahora no pueden llevar libremente.

Quienes si se han ido adaptando a esta situación buscando, ideando o innovando como pueden crear un ambiente con una nueva forma de vida haciendo cambios en su casa que les permita cocinar y comer bien preparando todo por sí mismos, realizar ejercicios, bailar, comunicarse con sus seres queridos, etc. han encontrado paz en medio de la tormenta.

Han aprendido a fluir con la ayuda de Dios y tener sabiduría para manejar su situación porque se han hecho un ambiente creativo en el que hacen uso al máximo de todos los recursos que tienen en casa sin ponerse a hacer cantaletas, añorar, patalear o lloriquear, ni complicarse por lo que no tienen.

Si les falta un ingrediente al cocinar no tienen por qué dejar de hacer una receta porque pueden inventar y buscar ingredientes substitutos, y si del todo no pueden hacer esa que querían, que busquen hacer otra con lo que si tengan y listo.

Si no pueden ir al gimnacio no les preocupa porque se ejercitan en casa con lo que tengan, si no pueden salir a bailar, bailan en su casa y listo.

El estar confinados en casa les ha enseñado que hay momentos en la vida que hemos de hacer un alto en el camino por nuestro bien y quienes no respetan esto se arriezgan a las consecuencias porque así como muchos hacen lo que quieren y no les pasa nada otros no corren con la misna suerte, por eso hay que obedecer al Ministerio de Salud y no dejarse llevar, hacer o copiar como monos la desobediencia de otros.

A quienes se les prendió una lucesita en el cerebro en este tiempo de meditación y reaprendisaje y aprendieron con obediencia y humildad a hacer muchas cosas que antes no hacían y disfrutar de su casa y ahorrar, les va a gustar continuar con este sistema de vida más económico, de hacer todo por sí mismos, pero quienes por orgullo, rebeldía, pereza o frustración no aprendieron nada, apenas les abran la puerta y puedan salir a la calle, saldrán como toros en estampida, a buscar en la calle quién les haga todo y seguirán gastando a diestra y siniestra más de la cuenta retrasando más el momento de tener una vida propia e independiente porque la vida callejera es muchísimo más costosa que la vida casera.

domingo, 26 de abril de 2020

En vida simple se gasta menos


Por Cira Arroyo Fuentes
26/04/2020   11:42 AM

Con el confinamiento por el covid-19 nos estamos dando cuenta de que para vivir de manera simple no necesitamos gastar tanto ni complicarnos comprando muchas cosas con las que antes pensábamos que no podíamos vivir.

Eso es lo que por muchísimos años han hecho las grandes empresas multimillonarias multinacionales, que sólo han sido movilizadoras de masas de gente, que lograron llegar allí lavándonos poco a poco el cerebro a todos, mediante anuncios en masa, de sus productos y eventos inventados, y creándonos necesidades que en realidad no teníamos sino que fueron inculcadas por ellos para sacarnos dinero a todos en masa también.

Estas empresas lograron su cometido y han hecho bailar al mundo a su son, han hecho que gran parte de la humanidad venda sus tierras y deje de sembrar para ser
ellas los proveedoras para tenernos en sus manos.

El gran problema de una empresa o una persona de tener mucho conocimiento, dinero y poder es ya creerse saberlo, tenerlo, y proveerlo todo porque esto le hace creer que es dueño de las vidas de los demás y querer hacer con ellas lo que quiere, sin importarle hacerles pasar penurias por tener más, ni enfermarlas y hasta matarlas con tal de conseguir sus ambiciosos propósitos particulares.

Con esto quiero decir que si el covid-19 no es un virus natural, sino fabricado por el hombre en el afán de uno o de unos pocos de adueñarse y quererlo todo, quienes podemos parar que eso suceda o al menos retrasarlo, somos nosotros, no dejándonos lavar más el cerebro con publicidad propagada por medios masivos de comunicación e Internet.

Si nosotros usamos sólo lo que realmente necesitamos para vivir y aprovechamos todo lo que gratuitamente la naturaleza nos da, y volvemos a trabajar la tierra, ... (la que nos quede, sea poca o mucha) o sembramos en dónde quiera que podamos y tengamos espacio, o hasta en macetas, podemos ser autosuficientes con mucho de lo que necesitamos y no tenemos que salir a comprarlo; y si cesamos de seguir botando el dinero en vicios, drogas ni modas, ni babosadas extravagantes que nos enmascaran y nos hacen lucir como payasos de circo, ni en conciertos,  conferencias ni eventos masivos e invertimosy nuestro dinero en alimentarnos bien, nos salimos de las garras de ese montón de personas ambiciosas, compañías y empresas que promueven con su gran show de artistas y conferencias motivadoras del consumismo loco y constante que es lo que tiene a la tierra y a la naturaleza tan mal como está.

Escapemos con Cristo de la Nueva Era que tiene muchos seguidores que en el fondo trabajan y son pagados por Los Illuminati.

Observen no más la señal o señales que hacen muchos millonarios, poderosos, artistas y famosos, y verán que hacen señales satánicas con sus manos y es porque siguen o dependen de estas empresas u organizaciones mundiales
satánicas.

sábado, 25 de abril de 2020

En todo tiempo menos es más

Por Cira Arroyo Fuentes   25/04/2020   10:20 PM

     Hacerse la vida fácil y huir con Cristo y su sabiduría de la asfixiante ola materialista de todo tiempo y más de la actualidad, nos da paz y oportunidad de ahorrar y estar preparados para momentos de emergencia como el que estamos viviendo con el covid-19, en que a muchos les han rebajado las horas de trabajo, otros trabajan medio tiempo y muchos perdieron su trabajo del todo.

Es mejor tener menos para hacer espacio en nuestra casa, más aún si la familia es numerosa para que puedan guardar distancia.

Una casa amplia con pocos muebles, sin mucho "chunche" que ordenar ni limpiar y gran espacio para caminar y moverse libremente dentro de ella, nos ayuda a descanzar más y librarnos de muchos dolores de cabeza y de no hacernos moretones en nuestro cuerpo al chocar con todo por falta de espacio.

Menos estorbos para  poder limpiar libremente es lo ideal porque así hay menos rincones que detallar, menos dinero que gastar en utensilios y líquidos de limpieza.

Ahhh, ¡qué maravilla!

Tener menos es tener más, porque más espacio nos permite disfrutar más de nuestro hogar y de nuestra familia, ejercitarnos en casa y hasta bailar y brincar suiza bajo techo si no tenemos patio,  jardín o un espacio afuera de la casa apropiado para hacerlo.

Cantidad de personas se gastan altas cuotas mensuales en gimnacios porque han comprado tantas cosas innecesarias para su casa, que no dejaron espacio ni para moverse.

La verdad es que nos hemos complicado la vida, por dejarnos manipular por monstruos materialistas, que nos han creado un mundo consumista, en el que inventan cosas de baja calidad, que pronto se rompen o se vuelven obsoletas, para que estemos renóvandolas todo el tiempo. Cosas que, al tenerlas, por ende nos obligan a hacer gastos en cadena porque la tarea de los comerciantes es mantener al comercio fluyendo para hacer más y más dinero a costilla de todos los consumidores.

Este virus a muchos les estropeó el negocio, y tienen que reinventarse haciendo algo que realmente supla necesidades básicas porque el poco dinero que tienen las personas no  pueden malgastarlo en tonterías innecesarias y Dios quiera que aprendan la lección porque el consumismo, el desenfreno, la vida loca o locura del mundo lo estaba destruyendo tanto a las personas como a la naturaleza en general .

Tantos inventos innecesarios y locos, que no son más que basura que los materialistas ambiciosos crean, los hacen sólo para distraer y entorpecer a gente.

Muchos inventos basura son extremanente llamativos y van dirigidos a niños y jóvenes para mantenerlos iperactivos o inquietos y que estrecen o vuelvan locos con sus exigentes caprichos a sus padres y familiares, pero no son más que  productos sin sentido que ni siquiera quienes los fabrican los usan, pero los hacen para sacarle dinero a otros y  mantenerlos distraídos o llenándolos de basura porque les conviene que estemos adormecidos para que no pensemos ni meditemos por mientras ellos nos quitan nuestro dinero, y se llevan lo mejor de nosotros y de nuestras tierras.

Otros se la pasan inventando eventos masivos porque sólo ven a la gente como un número o ganado para hacer mucho dinero en una actividad.

Todos estos inventos para sacar dinero en masa, si este virus no desaparece o no le encuentran la cura, no podrán volver a realizarlos.

Lo cierto es que la gente con este volver atrás y este reaprendisaje  que le está enseñando a valorar de verdad lo que le hace falta y desechar lo que no necesita, ...que muy lejos de darle paz y tranquilidad, se la quita, ... va a salir de su casa renovada y le va a ser más difícil a los materialistas ambiciosos lavarles el cerebro para convencerlas con sus negocios pasionales.

La tierra ahora está respirando, pero este alto forzado en el camino, que ha tenido que hacer la mayoría de la gente del mundo quedándose en casa, no basta para remediar el daño tan grande que la humanidad le ha causado al planeta.

Esperemos en Dios que cuando salgamos de este confinamiento seamos diferentes y cuidemos con sabiduría lo que todavía nos queda de la naturaleza y hagamos algo para revertir el cambio climático y el daño que hemos hecho a la casa de todos, nuestro planeta.

Recuerden que muchas veces haciendo menos, teniendo  menos y llevando una vida simple; tenemos paz y hacemos más, porque le permitimos a la naturaleza respirar y sanarse por ella misma.