© Cira Arroyo Fuentes 08/10/2019 08:58 p.m.
Este poema lo dedico con mucho cariño a todos los cibernautas.
Nada cuesta abrir la puerta
a un nuevo amor que nos llena
lo difícil es cerrarla
cuando la verdad no es plena.
La afinidad nos engaña
si no todo es conocido
todo nuestro ser se amaña
con lo poco que ha vivido.
Ya que en voces y suspiros
sin viva presencia de cuerpos
muy cercanos nos sentimos
con profundos sentimientos.
Por eso ...
Ignoremos nuestro sentir
porque aún no puede ser
no nos dejemos llevar
porque nos puede perder.
En realidad no sabemos
cual será nuestro destino
sólo estando frente a frente
sabremos si es sentir genuino.
Y aunque mucho hemos planeado
en largas conversaciones
no podemos apresurarnos
para tomar decisiones.
Y a los sueños de pensar
que disfrutamos de un buen vino
borremos continuamente
porque es incierto camino.
Por eso...
Ignoremos nuestro sentir
porque aún no puede ser
no nos dejemos llevar
porque nos puede perder.
Sabemos que actuamos mal
por no aceptar la realidad
de que no nos conocemos
en persona de verdad.
El terreno que pisamos
no nos mata ni envenena
si nos enseña a esperar
con gran fe una vida plena.
Y no podemos forzarnos
a rápidas decisiones
sólo aprendemos, crecemos
y huimos de falsas pasiones.
Por eso...
Ignoremos nuestro sentir
porque aún no puede ser
no nos dejemos llevar
porque nos puede perder.
"Escribo por Gracia y para la Gloria de Dios inéditas inspiraciones para sembrar el bien y el amor de Cristo en sus corazones". Gracias por su apoyo gratuito a mi blog, suscribirse a mi Canal en You Tube, darle Me Gusta, hacer comentarios y opiniones aquí y en todos mis sitios en Facebook, Instagram y Twitter es muy importante para mí porque así puedo seguir compartiéndoles gratuitamente mensajes y vídeos con mis inspiraciones.
martes, 8 de octubre de 2019
¿Dónde está mi libro?
Por Cira Arroyo Fuentes 09/10/2019 08:19 p.m.
La mayoría de las personas que piensan que todo en la vida es dinero y que nada se comparte de gratis, me preguntan cuando voy a hacer un libro, y como siempre mi respuesta es que mi libro está en la nube o en el aire, y lo voy haciendo poco a poco, cada día y lo voy dando a todos conforme lo voy escribiendo sin dinero de por medio, así tal cual Dios me lo da.
Se quedan extrañados de mi respuesta y mi actitud, y me ven como si fuera un bicho raro, o una excepción en este mundo materialista en que vivimos en que casi nadie da nada de gratis y prefieren llevarse a la tumba todas las obras y el arte que Dios les ha dado antes que compartirlas de gratis, pero de esto tendrán que darle cuentas a Dios que gratuitamente y por amor les dio todos los dones y talentos, no para que los escondieran, sino para que lo compartieran con los demás.
La mayoría de las personas que piensan que todo en la vida es dinero y que nada se comparte de gratis, me preguntan cuando voy a hacer un libro, y como siempre mi respuesta es que mi libro está en la nube o en el aire, y lo voy haciendo poco a poco, cada día y lo voy dando a todos conforme lo voy escribiendo sin dinero de por medio, así tal cual Dios me lo da.
Se quedan extrañados de mi respuesta y mi actitud, y me ven como si fuera un bicho raro, o una excepción en este mundo materialista en que vivimos en que casi nadie da nada de gratis y prefieren llevarse a la tumba todas las obras y el arte que Dios les ha dado antes que compartirlas de gratis, pero de esto tendrán que darle cuentas a Dios que gratuitamente y por amor les dio todos los dones y talentos, no para que los escondieran, sino para que lo compartieran con los demás.
La persona perezoza
Por © Cira Arroyo Fuentes 11/03/2017 11:41 a.m.
La persona perezosa
no ayuda nunca en su casa
no ayuda nunca en su casa
frente a su hogar o en la calle
sin hacer nada horas pasa.
sin hacer nada horas pasa.
Sólo observa al vecindario,
viendo pasar gente y carros
viendo pasar gente y carros
exponiéndose al peligro
con extraños y macabros.
con extraños y macabros.
Mientras otros la mantengan
con la barriga bien llena
con la barriga bien llena
y ropa buena a escoger
no confronta ni un problema.
no confronta ni un problema.
Cuando ya no tenga apoyo
y vea la realidad
y vea la realidad
buscará el camino simple
que a la ruina la guiará.
que a la ruina la guiará.
Muy fácil hará dinero
al hacer turbio trabajo,
al hacer turbio trabajo,
y aunque llegue a ser muy rica
caerá siempre más bajo.
caerá siempre más bajo.
Al perder toda moral
y respeto para sí misma
y respeto para sí misma
hundiéndose en profundo pozo
y una vida en estigma.
y una vida en estigma.
Llena de libertinaje, robos,
drogas y prostitución,
drogas y prostitución,
que son negocios ilícitos
que le causan destrucción.
Pero si despierta a tiempo
para enmendar su camino
que le causan destrucción.
Pero si despierta a tiempo
para enmendar su camino
con una buena actitud
puede cambiar su destino.
puede cambiar su destino.
Inmigrante en otro país y en el nuestro
Por © Cira Arroyo Fuentes 04/06/2016 4:34 a.m.
"Quien de ustedes ha tenido la experiencia de ser inmigrante primero en otra tierra o en otro país, donde tiene que llegar a empezar una nueva vida, teniendo que aprender en muchos casos hasta el idioma y las costumbres del nuevo país, para que una vez que ha logrado adaptarse lo mejor posible, tener después de haber estado allí por muchos años, que regresar a su país natal para llevarse la sorpresa de que ahora es inmigrante en su propia tierra también, porque regresa tan diferente por las nuevas vivencias y costumbres adquiridas que por más que se esfuerce ya no ha podido ser igual a como era antes de emigrar, porque la vida en el exterior le marcó para siempre".
El gran deseo de emigrar a otro lugar o país, nace en una persona al no sentirse conforme donde nació o vive, sea porque está pasando muchas necesidades, por no tener las oportunidades que podría tener en otro país o por haber conocido en su infancia o juventud, mediante los medios de comunicación (TV, Internet, Radio, etc) o personalmente, a gente distinta a ella, que al verlas le pareció como venidas de otro mundo, con un físico, idioma y costumbres totalmente diferentes a todo lo que en su vida ha visto, que le ha impactado tanto, que le despierta el anhelo de conocer ese mundo o esa tierra como sea y cuanto antes.
El observar a esas personas con un estado( status) de vida diferente, saludables, fuertes, educadas, altas y más, hace que una persona no se conforme con el sistema de vida que lleva en su lugar nativo, por lo que empieza a soñar cada vez más alto, aumentando así su voluntad de marcharse a ese país soñado, sea como sea, a la primera oportunidad que se le presente, por lo que muchos deciden pasar la frontera a ese país "mojados" o de manera ilegal, otros buscan la forma de que algún familiar o alguien a quien conocen en ese país, les ayude o los reclame, y si no pueden lograrlo por este medio, no les queda más remedio que esforzarse por estudiar y prepararse más para después trabajar, poder ahorrar y viajar por sus propios medios.
Quien es un soñador que anhela emigrar, está tan entusiasmado con su sueño, que pierde la noción natural de vida cotidiana que sus demás compatriotas tienen, y esta vida ya no le interesa, y se va apartando de esos que simplemente se conforman con quedarse a luchar en el lugar donde nacieron, del cual nunca ni siquiera les pasa por la cabeza la idea de marcharse para otro lado, sea porque son conformistas, o porque les da temor el lanzarse a descubrir nuevas oportunidades en un lugar desconocido, y prefieren quedarse en lo viejo por conocido, que arriesgarse a emigrar a lo nuevo por conocer, aunque su vida en ese lugar pueda ser mejor, y prefieren vivir donde ya están acostumbrados, aunque no surjan tanto como la persona que emigra a un lugar mejor.
A los creadores y soñadores esta vida no les basta y siempre quieren conocer cosas nuevas que hay más allá, andar por nuevos mundos, aprender nuevos idiomas y costumbres, y si no pueden trasladarse físicamente, aprende vidas diferentes por medio de vídeos, fotos, leyendo libros, documentales y más, de lugares distintos al suyo, y lo hacen no por necesidad económica, sino por mero placer, y si estos sitios se le hacen tan fascinantes que verlos a distancia no les satisface, buscan la forma de poder estar en ellos físicamente y no les importa los problemas que se le presenten para lograr su sueño de emigrar.
Como el punto de vista del soñador y su meta de vida es ser cada día mejor, siempre busca lo mejor para todos, sea extrayendo sabios conocimientos de la fuente de vida de Dios que vive en su interior, o por medio de nuevas ideas que le puedan aportar personas de otro país, por eso su meta se torna diferente a sus coterráneos y ya no le interesa nada de lo que sucede a su alrededor, menos aún si la gente es terca, testaruda, cizañosa y corrupta; que por dejarse manipular por ambiciosos y corruptos peces grandes, permiten que estos los manejen a su antojo como si fueran sus monigotes, sin atreverse a llevarles la contraria para nada, ni buscar una nueva vida, para cambiar el panorama en que vive, en el que no acepta cambios, ni se deja ayudar por los soñadores o creadores, quienes pueden aportarle nuevas, sabias y justas ideas para resolver los problemas que se le presentan en su vida.
Al ver esta actitud tan conformista, tradicionalista y negativa, el soñador sólo se concentra en perseguir la meta personal que se fijó completamente, que es marcharse a otro lugar o país donde sí sea aceptado, escuchado y le permitan SER y HACER lo que tanto ha anhelado, para seguir luchando por cumplir sus sueños y aportar a otros todos los consejos nuevos que tiene para dar.
A la persona innovadora le disgusta observar a las personas ser tan conformistas y casarse con goteras de cada problema que les acosa su vida, y no hacer nada para cambiar el ritmo de vida que le heredó el pasado, siendo y haciendo repetidamente lo mismo, sin atreverse a tener valor de hacer algo para cambiar y ser diferente.
Esta actitud es inaceptable para toda aquella persona que es positiva y abierta a los cambios, siempre que estos sean para mejorar una situación.
Ver a la gente no tener paz porque permite que otros les manipulen, que les cojan como empleados, y que sólo vivan a costilla de ellos, sin importarles para nada que los que les hacen todo hasta se enfermen es intolerable, porque entre más permitan a otros que les trate así, la cizaña crece y crece hasta que les ahoga, cayendo cada día en una mayor miseria, más enfermedad y más problemas, sólo por no atreverse a delegar responsabilidades, poner nuevas reglas y guiar a los demás a que aprendan a ser independientes y que nunca tengan que depender ni coger como empleado, ni hacerle la vida imposible a nadie.
Cuando las personas justas, con nuevas ideas ven perdurar este sistema añejo de vida, temeroso a a innovar y actuar, lleno de negatividad, de costumbrismo, de gente que sólo copia lo que otros en el pasado han hecho, que son renuentes a cambiar y a aceptar que nadie haga nada para cambiarlo, lo único que desean es marcharse a otro lugar, donde sus ideas sean escuchadas y tomadas en cuenta.
El problema es que la mayoría de las personas tienen miedo de ser diferentes, y de salirse de entre las garras de los grandes mañosos y ambiciosos manipuladores o manejadores de inmensas masas de gente, a la que con astucia les han creado un estilo de vida común para todos, que es repetitivo, encarcelándolos en una vida en la cuál hagan o se dediquen a lo mismo en sus ratos de ocio siempre. Un sistema de vida en el cual son los que se creen más grandes, ricos y poderosos quienes se dan la libertad de hacer con el pueblo lo que se les antoja haciendo bailar a todas las personas como marionetas a su mejor postor, buscando siempre no permitirle a nadie SER ni ser diferente, para que no se les salgan del redil, porque temen que si el pueblo se les despierta del roll de vida al que ellos les tienen acostumbrados perderán clientes que ya no asistirán a los masivos eventos que realizan para sacarle el dinero a todos.
Estos manipuladores de masas, que cada vez son más ricos a costilla de la gente robotizada, no les gusta perder a ninguna persona, porque saben que junto con ella se les puede salir de las manos los familiares de esta y muchas más familias a las que esta persona puede convencer de salirse de frecuentar esas actividades.
Los manipuladores de de masas de gente son los que hacen que un país o un lugar sea pobre porque no le permiten la gente ni pensar y sólo quiere que quieren que participen en las actividades que ellos organizan para llenarse los bolsillos y la gente se presta para esto.
El haber conocido el sistema de vida ordenado que se ejecuta en otro país, hace que una persona sea segura y se dé cuenta que todo gobierno o lugar en donde la autoridad que tiene es flexible y tolerante ante la ambición de unos pocos, que por lograr lo que ambicionan, le dan pasó argollas llenas de choricerísmo y corrupción, que no les importa que todo el pueblo se hunda poco a poco con tal de lograr sus ambiciosos y corruptos sueños personales.
Cuando una persona creativa, soñadora y abierta a cambios, ve a toda la gente como hipnotizada, llevando la vida como robots, viviendo dentro de las costumbres que otros grandes ambiciosos les crean, esta persona se desanima porque observa como todo un pueblo es manejado por unos pocos que los mantienen atontados, adormecidos por medio de los medios de comunicación que tienen, que son totalmente manejados y comprados para que obedezcan a los grandes corruptos manipuladores de masas de gente.
Es terrible observar a la gente con un comportamiento totalmente infundido por los medios de comunicación, que a leguas se ve que lo único que buscan es sacarles todo el dinero que se ganan en sus trabajos, para que se lo gasten en bailes, conciertos, estadios, corridas de toros y más actividades llenas de licor, que los dejan casi limpios, apenas con algo para seguir viviendo.
Si las personas tuvieran una personalidad fuerte con Dios, no se dejarían arrastrar de esta manera, y tendrían más dinero para invertirlo en su propia realización personal y por ende no habrían tantas familias viviendo tan pobremente por causa de las drogas y los vicios que adquieren al asistir a estos eventos masivos donde el licor, la comida chatarra y la corrupción brilla por su presencia.
Los movilizadores de masas siempre tienen montado todo un negocio con ventas de toda clase para que las personas se gasten hasta el último centavo que tienen.
Si la gente hiciera caso omiso a la publicidad, y meditara más en que gasta su dinero, y lo ahorrara, tendría una mejor vida y no tuviera necesidad de salir huyendo a emigrar a otro país o lugar para cambiar de vida.
Cada país, si quiere parar la inmigración que existe hacia su territorio, tiene que atacar la corrupción, e impedir que la cizaña crezca, y no permitir que el pueblo sea dañado por los grandes vendedores de droga que tienen negocios corruptos por todas partes a lo largo y ancho del país. Estos peces grandes tienen quien les trabaje hasta en los pueblos, con todo un negocio ilícito montado para poder llegar a corromper a cada niño o Joven que encuentren inestable para tener un nuevo consumidor o cliente de su corrupto negocio que le dure por muchos años.
En cada evento masivo que organizan estos corruptos y ambiciosos peces grandes lo primero que tienen a la venta son licores, cervezas, gaseosas, cigarros, comida chatarra y para amenizar la fiesta organizan bailes con música bulliciosa que aturde o enloquece a las personas, le sacan el dinero y luego a la gente no le alcanza ni para ahorrar e ir rápido cumpliendo sus sueños personales, porque todo su dinero se lo han dado a otros que cada día son más ricos y nunca se sacian.
A la gente que está embobada por los eventos del mundo no le queda ni tiempo para meditar que está haciendo con su vida y esto es precisamente lo que las grandes multinacionales y nacionales movilizadores de masas quieren, que los ambiciosos que hay en cada país quieren, que es que LA GENTE NO MEDITE, NO PIENSE Y CORRA A LLENARLE SU BOLSILLO, AUNQUE LOS DEJEN SIN NADA NI PARA VESTIR NI COMER.
Los manipuladores de de masas de gente son los que hacen que un país o un lugar sea pobre porque no le permiten la gente ni pensar y sólo quiere que quieren que participen en las actividades que ellos organizan para llenarse los bolsillos y la gente se presta para esto.
El haber conocido el sistema de vida ordenado que se ejecuta en otro país, hace que una persona sea segura y se dé cuenta que todo gobierno o lugar en donde la autoridad que tiene es flexible y tolerante ante la ambición de unos pocos, que por lograr lo que ambicionan, le dan pasó argollas llenas de choricerísmo y corrupción, que no les importa que todo el pueblo se hunda poco a poco con tal de lograr sus ambiciosos y corruptos sueños personales.
Cuando una persona creativa, soñadora y abierta a cambios, ve a toda la gente como hipnotizada, llevando la vida como robots, viviendo dentro de las costumbres que otros grandes ambiciosos les crean, esta persona se desanima porque observa como todo un pueblo es manejado por unos pocos que los mantienen atontados, adormecidos por medio de los medios de comunicación que tienen, que son totalmente manejados y comprados para que obedezcan a los grandes corruptos manipuladores de masas de gente.
Es terrible observar a la gente con un comportamiento totalmente infundido por los medios de comunicación, que a leguas se ve que lo único que buscan es sacarles todo el dinero que se ganan en sus trabajos, para que se lo gasten en bailes, conciertos, estadios, corridas de toros y más actividades llenas de licor, que los dejan casi limpios, apenas con algo para seguir viviendo.
Si las personas tuvieran una personalidad fuerte con Dios, no se dejarían arrastrar de esta manera, y tendrían más dinero para invertirlo en su propia realización personal y por ende no habrían tantas familias viviendo tan pobremente por causa de las drogas y los vicios que adquieren al asistir a estos eventos masivos donde el licor, la comida chatarra y la corrupción brilla por su presencia.
Los movilizadores de masas siempre tienen montado todo un negocio con ventas de toda clase para que las personas se gasten hasta el último centavo que tienen.
Si la gente hiciera caso omiso a la publicidad, y meditara más en que gasta su dinero, y lo ahorrara, tendría una mejor vida y no tuviera necesidad de salir huyendo a emigrar a otro país o lugar para cambiar de vida.
Cada país, si quiere parar la inmigración que existe hacia su territorio, tiene que atacar la corrupción, e impedir que la cizaña crezca, y no permitir que el pueblo sea dañado por los grandes vendedores de droga que tienen negocios corruptos por todas partes a lo largo y ancho del país. Estos peces grandes tienen quien les trabaje hasta en los pueblos, con todo un negocio ilícito montado para poder llegar a corromper a cada niño o Joven que encuentren inestable para tener un nuevo consumidor o cliente de su corrupto negocio que le dure por muchos años.
En cada evento masivo que organizan estos corruptos y ambiciosos peces grandes lo primero que tienen a la venta son licores, cervezas, gaseosas, cigarros, comida chatarra y para amenizar la fiesta organizan bailes con música bulliciosa que aturde o enloquece a las personas, le sacan el dinero y luego a la gente no le alcanza ni para ahorrar e ir rápido cumpliendo sus sueños personales, porque todo su dinero se lo han dado a otros que cada día son más ricos y nunca se sacian.
A la gente que está embobada por los eventos del mundo no le queda ni tiempo para meditar que está haciendo con su vida y esto es precisamente lo que las grandes multinacionales y nacionales movilizadores de masas quieren, que los ambiciosos que hay en cada país quieren, que es que LA GENTE NO MEDITE, NO PIENSE Y CORRA A LLENARLE SU BOLSILLO, AUNQUE LOS DEJEN SIN NADA NI PARA VESTIR NI COMER.
LA EXPERIENCIA DE SER INMIGRANTE EN OTRO PAÍS Y HASTA EN EL NUESTRO
Por © Cira Arroyo Fuentes 04/06/2016 4:34 a.m.
Nota: ¿Quien de ustedes ha tenido la experiencia de ser inmigrante primero en otra tierra o en otro país donde tiene que llegar a empezar una nueva vida teniendo que aprender en muchos casos hasta el idioma y las costumbres para que una vez que ha logrado adaptarse lo mejor posible tener después de haber estado allí por muchos años que regresar a su país natal para llevarse la sorpresa de que ahora es inmigrante en su propia tierra también, porque regresa tan diferente por las nuevas vivencias y costumbres adquiridas que por más que se esfuerce ya no ha podido ser igual a como era antes de emigrar, porque la vida en el exterior le marcó para siempre.
El gran deseo de emigrar a otro lugar o país nace en una persona al no sentirse conforme donde nació o vive sea porque está pasando muchas necesidades o por no tener las oportunidades que podría tener en otro país o por haber conocido en su infancia o juventud mediante los medios de comunicación (TV, Internet, Radio, etc) o personalmente a gente distinta a ella, que al verla le pareció como venidas de otro mundo, con un físico, idioma y costumbres totalmente diferentes a todo lo que en su vida ha visto, que le ha impactado tanto que le despierta el anhelo de conocer ese mundo o esa tierra como sea.
El observar a esas personas con un status de vida diferente, saludables, fuertes, educadas, altas y más hace que una persona no se conforme con el sistema de vida que lleva en su lugar nativo, por lo que empieza a soñar cada vez más alto aumentando así su voluntad de marcharse sea como sea a la primera oportunidad que se le presente, por lo que muchos deciden pasar "mojados" o de manera ilegal, otros buscan la forma de que algún familiar o alguien a quien conocen en ese pais les ayude o los reclame y si no pueden lograrlo de esta forma no les queda más remedio que esforzarse por estudiar y prepararse más para después trabajar, poder ahorrar y viajar por sus propios medios.
Quien es un soñador que anhela emigrar está tan entusiasmado con su sueño que pierde la noción natural de vida cotidiana que sus demás compatriotas tienen y esta vida ya no le interesa y se va apartando de esos que simplemente se conforman con quedarse a luchar en el lugar donde nacieron del cual nunca ni siquiera les pasa la idea de marcharse para otro lado sea porque son conformistas o porque les da temor el lanzarse a descubrir nuevas oportunidades en un lugar desconocido y prefieren quedarse en lo viejo por conocido que arriesgarse a emigrar a lo nuevo por conocer aunque su vida en ese lugar pueda ser mejor y prefieren vivir donde ya están acostumbrados aunque no surjan tanto como la persona que emigra a un lugar mejor.
A los creadores y soñadores esta vida no les basta y siempre quieren conocer cosas nuevas que hay más allá, andar por nuevos mundos, aprender nuevos idiomas y costumbres y si no puede trasladarse físicamente aprende vidas diferentes por medio de vídeos, fotos, leyendo libros, documentales y más de lugares distintos al suyo y lo hacen no por necesidad económica sino por mero placer y si estos sitios se le hacen tan fascinantes que verlos a distancia no les satisface buscan la forma de poder estar en ellos físicamente y no les importa los problemas que se le presenten para lograr su sueño de emigrar.
Como el punto de vista del soñador y su meta de vida es ser cada día mejor y buscar lo mejor para todos sea extrayendo sabios conocimientos de la fuente de vida llena de conocimientos que proviene del Dios que vive en su interior o por medio de nuevas ideas que le puedan aportar personas de otro país, su meta se torna diferente a sus coterráneos ya no le interesa nada de lo que sucede a su alrededor menos aún si la gente es terca, testaruda, cizañosa y corrupta que por dejarse manipular por ambiciosos peces grandes permiten que estos los manejen a su antojo, sin atreverse a llevarles la contraria ni buscar una nueva vida para cambiar el panorama en que vive, en el que no acepta cambios ni se deja ayudar por los soñadores o creadores quienes pueden aportarle nuevas y justas ideas para resolver los problemas que se le presentan en su vida, por lo que el soñador sólo se concentra en perseguir la meta personal que se fijó completamente que es marcharse a otro lugar o país donde sí sea aceptado, escuchado y le permitan SER y HACER lo que tanto ha anhelado para seguir luchando por cumplir sus sueños y aportar a otros todos los consejos nuevos que tiene para dar.
A la persona innovadora le disgusta observar a las personas ser tan conformistas y casarse con goteras de cada problema que les acosa su vida y no hacer nada para cambiar el ritmo de vida que le heredó el pasado, siendo y haciendo repetidamente lo mismo sin atreverse a tener valor de hacer algo para cambiar y ser diferente es inaceptable para toda aquella persona que es positiva y abierta a los cambios siempre que estos sean para mejorar una situación.
Ver a la gente no tener paz porque permite que otros les manipulen, que les cojan como empleados y que sólo vivan a costilla de ellos sin importarles para nada que los que les hacen todo hasta se enfermen es intolerable, porque entre más permitan a otros que les trate así, la cizaña crece y crece hasta que les ahoga, cayendo cada día en una mayor miseria, más enfermedad y más problemas sólo por no atreverse a delegar responsabilidades, poner nuevas reglas y guiar a los demás a que aprendan a ser independientes y que nunca tengan que depender ni coger como empleado, ni hacerle la vida imposible a nadie.
Cuando las personas justas, con nuevas ideas ven perdurar este sistema añejo de vida, temeroso a a innovar y actuar, lleno de negatividad, de costumbrismo, de gente que sólo copia lo que otros en el pasado han hecho, que son renuentes a cambiar y a aceptar que nadie haga nada para cambiarlo, lo único que desean es marcharse a otro lugar donde sus ideas sean escuchadas y tomadas en cuenta.
El problema es que la mayoría de las personas tienen miedo de ser diferentes, y de salirse de entre las garras de los grandes mañosos y ambiciosos manipuladores o manejadores de inmensas masas de gente a la que con astucia les han creado un estilo de vida común para todos, que es repetitivo, encarcelándolos en una vida en la cuál hagan o se dediquen a lo mismo en sus ratos de ocio siempre. Un sistema de vida en el cual son los que se creen más grandes, ricos y poderosos quienes se dan la libertad de hacer con el pueblo lo que se les antoja haciendo bailar a todas las personas como marionetas a su mejor postor, buscando siempre no permitirle a nadie SER ni ser diferente, para que no se les salgan del redil, porque temen que si el pueblo se les despierta del roll de vida al que ellos les tienen acostumbrados perderán clientes que ya no asistirán a los masivos eventos que realizan para sacarle el dinero a todos. Estos manipuladores de masas que cada vez son más ricos a costilla de la gente robotizada no les gusta perder a ninguna persona, porque saben que junto con ella se les puede salir de las manos los familiares de esta y muchas más familias a las que esta persona puede convencer de salirse de frecuentar esas actividades.
Los manipuladores de de masas de gente son los que hacen que un país o un lugar sea pobre porque no le permiten la gente ni pensar y sólo quiere que quieren que participen en las actividades que ellos organizan para llenarse los bolsillos y la gente se presta para esto.
El haber conocido el sistema de vida ordenado que se ejecuta en otro país hace que una persona sea segura y se dé cuenta que todo gobierno o lugar en donde la autoridad que tiene es flexible y tolerante ante la ambición de unos pocos que por lograr le dan pasó argollas llenas de choricerísmo y corrupción que no les importa que todo el pueblo se hunda poco a poco con tal de lograr sus ambiciosos y corruptos sueños personales.
Cuando una persona creativa, soñadora y abierta a cambios ve a toda la gente como hipnotizada llevando la vida como robots viviendo dentro de las costumbres que otros grandes ambiciosos les crean, esta persona se desanima porque observa como todo un pueblo es manejado por unos pocos que los mantienen atontados, adormecidos por medio de los medios de comunicación que tienen que son totalmente manejados y comprados para que obedezcan a los grandes corruptos manipuladores de masas de gente.
Es terrible observar a la gente con un comportamiento totalmente infundido por los medios de comunicación que a leguas se ve que lo único que buscan es sacarles todo el dinero que se ganan en sus trabajos para que se lo gasten en bailes, conciertos, estadios, corridas de toros y más actividades llenas de licor, que los dejan casi limpios, apenas con algo para seguir viviendo.
Si las personas tuvieran una personalidad fuerte con Dios no se dejarían arrastrar de esta manera y tendrían más dinero para invertirlo en su propia realización personal y por ende no habrían tantas familias viviendo tan pobremente por causa de las drogas y los vicios que adquieren al asistir a estos eventos masivos donde el licor, la comida chatarra y la corrupción brilla por su presencia.
Los movilizadores de masas siempre tienen montado todo un negocio con ventas de toda clase para que las personas se gasten hasta el último centavo que tienen.
Si la gente hiciera caso omiso a la publicidad y meditara más en que gasta su dinero y lo ahorrara tendría una mejor vida y no tuviera necesidad de salir huyendo a emigrar a otro país o lugar para cambiar de vida.
Cada país si quiere parar la inmigración que existe hacia su territorio tiene que atacar la corrupción e impedir que la cizaña crezca y no permitir que el pueblo sea dañado por los grandes vendedores de droga que tienen negocios corruptos por todas partes a lo largo y ancho del país. Estos peces grandes tienen quien les trabaje hasta en los pueblos, con todo un negocio ilícito montado para poder llegar a corromper a cada niño o Joven que encuentren inestable para tener un nuevo consumidor o cliente de su corrupto negocio que le dure por muchos años.
En cada evento masivo que organizan estos corruptos y ambiciosos peces grandes lo primero que tienen a la venta son licores, cervezas, gaseosas, cigarros, comida chatarra y para amenizar la fiesta organizan bailes con música bulliciosa que aturde o enloquece a las personas, le sacan el dinero y luego a la gente no le alcanza ni para ahorrar e ir rápido cumpliendo sus sueños personales, porque todo su dinero se lo han dado a otros que cada día son más ricos y nunca se sacian.
A la gente que está embobada por los eventos del mundo no le queda ni tiempo para meditar que está haciendo con su vida y esto es precisamente lo que las grandes multinacionales y nacionales movilizadores de masas quieren que los ambiciosos que hay en cada país quieren, que es que LA GENTE NO MEDITE, NO PIENSE Y CORRA A LLENARLE SU BOLSILLO, AUNQUE LOS DEJEN SIN NADA NI PARA VESTIR NI COMER.
Nota: ¿Quien de ustedes ha tenido la experiencia de ser inmigrante primero en otra tierra o en otro país donde tiene que llegar a empezar una nueva vida teniendo que aprender en muchos casos hasta el idioma y las costumbres para que una vez que ha logrado adaptarse lo mejor posible tener después de haber estado allí por muchos años que regresar a su país natal para llevarse la sorpresa de que ahora es inmigrante en su propia tierra también, porque regresa tan diferente por las nuevas vivencias y costumbres adquiridas que por más que se esfuerce ya no ha podido ser igual a como era antes de emigrar, porque la vida en el exterior le marcó para siempre.
El gran deseo de emigrar a otro lugar o país nace en una persona al no sentirse conforme donde nació o vive sea porque está pasando muchas necesidades o por no tener las oportunidades que podría tener en otro país o por haber conocido en su infancia o juventud mediante los medios de comunicación (TV, Internet, Radio, etc) o personalmente a gente distinta a ella, que al verla le pareció como venidas de otro mundo, con un físico, idioma y costumbres totalmente diferentes a todo lo que en su vida ha visto, que le ha impactado tanto que le despierta el anhelo de conocer ese mundo o esa tierra como sea.
El observar a esas personas con un status de vida diferente, saludables, fuertes, educadas, altas y más hace que una persona no se conforme con el sistema de vida que lleva en su lugar nativo, por lo que empieza a soñar cada vez más alto aumentando así su voluntad de marcharse sea como sea a la primera oportunidad que se le presente, por lo que muchos deciden pasar "mojados" o de manera ilegal, otros buscan la forma de que algún familiar o alguien a quien conocen en ese pais les ayude o los reclame y si no pueden lograrlo de esta forma no les queda más remedio que esforzarse por estudiar y prepararse más para después trabajar, poder ahorrar y viajar por sus propios medios.
Quien es un soñador que anhela emigrar está tan entusiasmado con su sueño que pierde la noción natural de vida cotidiana que sus demás compatriotas tienen y esta vida ya no le interesa y se va apartando de esos que simplemente se conforman con quedarse a luchar en el lugar donde nacieron del cual nunca ni siquiera les pasa la idea de marcharse para otro lado sea porque son conformistas o porque les da temor el lanzarse a descubrir nuevas oportunidades en un lugar desconocido y prefieren quedarse en lo viejo por conocido que arriesgarse a emigrar a lo nuevo por conocer aunque su vida en ese lugar pueda ser mejor y prefieren vivir donde ya están acostumbrados aunque no surjan tanto como la persona que emigra a un lugar mejor.
A los creadores y soñadores esta vida no les basta y siempre quieren conocer cosas nuevas que hay más allá, andar por nuevos mundos, aprender nuevos idiomas y costumbres y si no puede trasladarse físicamente aprende vidas diferentes por medio de vídeos, fotos, leyendo libros, documentales y más de lugares distintos al suyo y lo hacen no por necesidad económica sino por mero placer y si estos sitios se le hacen tan fascinantes que verlos a distancia no les satisface buscan la forma de poder estar en ellos físicamente y no les importa los problemas que se le presenten para lograr su sueño de emigrar.
Como el punto de vista del soñador y su meta de vida es ser cada día mejor y buscar lo mejor para todos sea extrayendo sabios conocimientos de la fuente de vida llena de conocimientos que proviene del Dios que vive en su interior o por medio de nuevas ideas que le puedan aportar personas de otro país, su meta se torna diferente a sus coterráneos ya no le interesa nada de lo que sucede a su alrededor menos aún si la gente es terca, testaruda, cizañosa y corrupta que por dejarse manipular por ambiciosos peces grandes permiten que estos los manejen a su antojo, sin atreverse a llevarles la contraria ni buscar una nueva vida para cambiar el panorama en que vive, en el que no acepta cambios ni se deja ayudar por los soñadores o creadores quienes pueden aportarle nuevas y justas ideas para resolver los problemas que se le presentan en su vida, por lo que el soñador sólo se concentra en perseguir la meta personal que se fijó completamente que es marcharse a otro lugar o país donde sí sea aceptado, escuchado y le permitan SER y HACER lo que tanto ha anhelado para seguir luchando por cumplir sus sueños y aportar a otros todos los consejos nuevos que tiene para dar.
A la persona innovadora le disgusta observar a las personas ser tan conformistas y casarse con goteras de cada problema que les acosa su vida y no hacer nada para cambiar el ritmo de vida que le heredó el pasado, siendo y haciendo repetidamente lo mismo sin atreverse a tener valor de hacer algo para cambiar y ser diferente es inaceptable para toda aquella persona que es positiva y abierta a los cambios siempre que estos sean para mejorar una situación.
Ver a la gente no tener paz porque permite que otros les manipulen, que les cojan como empleados y que sólo vivan a costilla de ellos sin importarles para nada que los que les hacen todo hasta se enfermen es intolerable, porque entre más permitan a otros que les trate así, la cizaña crece y crece hasta que les ahoga, cayendo cada día en una mayor miseria, más enfermedad y más problemas sólo por no atreverse a delegar responsabilidades, poner nuevas reglas y guiar a los demás a que aprendan a ser independientes y que nunca tengan que depender ni coger como empleado, ni hacerle la vida imposible a nadie.
Cuando las personas justas, con nuevas ideas ven perdurar este sistema añejo de vida, temeroso a a innovar y actuar, lleno de negatividad, de costumbrismo, de gente que sólo copia lo que otros en el pasado han hecho, que son renuentes a cambiar y a aceptar que nadie haga nada para cambiarlo, lo único que desean es marcharse a otro lugar donde sus ideas sean escuchadas y tomadas en cuenta.
El problema es que la mayoría de las personas tienen miedo de ser diferentes, y de salirse de entre las garras de los grandes mañosos y ambiciosos manipuladores o manejadores de inmensas masas de gente a la que con astucia les han creado un estilo de vida común para todos, que es repetitivo, encarcelándolos en una vida en la cuál hagan o se dediquen a lo mismo en sus ratos de ocio siempre. Un sistema de vida en el cual son los que se creen más grandes, ricos y poderosos quienes se dan la libertad de hacer con el pueblo lo que se les antoja haciendo bailar a todas las personas como marionetas a su mejor postor, buscando siempre no permitirle a nadie SER ni ser diferente, para que no se les salgan del redil, porque temen que si el pueblo se les despierta del roll de vida al que ellos les tienen acostumbrados perderán clientes que ya no asistirán a los masivos eventos que realizan para sacarle el dinero a todos. Estos manipuladores de masas que cada vez son más ricos a costilla de la gente robotizada no les gusta perder a ninguna persona, porque saben que junto con ella se les puede salir de las manos los familiares de esta y muchas más familias a las que esta persona puede convencer de salirse de frecuentar esas actividades.
Los manipuladores de de masas de gente son los que hacen que un país o un lugar sea pobre porque no le permiten la gente ni pensar y sólo quiere que quieren que participen en las actividades que ellos organizan para llenarse los bolsillos y la gente se presta para esto.
El haber conocido el sistema de vida ordenado que se ejecuta en otro país hace que una persona sea segura y se dé cuenta que todo gobierno o lugar en donde la autoridad que tiene es flexible y tolerante ante la ambición de unos pocos que por lograr le dan pasó argollas llenas de choricerísmo y corrupción que no les importa que todo el pueblo se hunda poco a poco con tal de lograr sus ambiciosos y corruptos sueños personales.
Cuando una persona creativa, soñadora y abierta a cambios ve a toda la gente como hipnotizada llevando la vida como robots viviendo dentro de las costumbres que otros grandes ambiciosos les crean, esta persona se desanima porque observa como todo un pueblo es manejado por unos pocos que los mantienen atontados, adormecidos por medio de los medios de comunicación que tienen que son totalmente manejados y comprados para que obedezcan a los grandes corruptos manipuladores de masas de gente.
Es terrible observar a la gente con un comportamiento totalmente infundido por los medios de comunicación que a leguas se ve que lo único que buscan es sacarles todo el dinero que se ganan en sus trabajos para que se lo gasten en bailes, conciertos, estadios, corridas de toros y más actividades llenas de licor, que los dejan casi limpios, apenas con algo para seguir viviendo.
Si las personas tuvieran una personalidad fuerte con Dios no se dejarían arrastrar de esta manera y tendrían más dinero para invertirlo en su propia realización personal y por ende no habrían tantas familias viviendo tan pobremente por causa de las drogas y los vicios que adquieren al asistir a estos eventos masivos donde el licor, la comida chatarra y la corrupción brilla por su presencia.
Los movilizadores de masas siempre tienen montado todo un negocio con ventas de toda clase para que las personas se gasten hasta el último centavo que tienen.
Si la gente hiciera caso omiso a la publicidad y meditara más en que gasta su dinero y lo ahorrara tendría una mejor vida y no tuviera necesidad de salir huyendo a emigrar a otro país o lugar para cambiar de vida.
Cada país si quiere parar la inmigración que existe hacia su territorio tiene que atacar la corrupción e impedir que la cizaña crezca y no permitir que el pueblo sea dañado por los grandes vendedores de droga que tienen negocios corruptos por todas partes a lo largo y ancho del país. Estos peces grandes tienen quien les trabaje hasta en los pueblos, con todo un negocio ilícito montado para poder llegar a corromper a cada niño o Joven que encuentren inestable para tener un nuevo consumidor o cliente de su corrupto negocio que le dure por muchos años.
En cada evento masivo que organizan estos corruptos y ambiciosos peces grandes lo primero que tienen a la venta son licores, cervezas, gaseosas, cigarros, comida chatarra y para amenizar la fiesta organizan bailes con música bulliciosa que aturde o enloquece a las personas, le sacan el dinero y luego a la gente no le alcanza ni para ahorrar e ir rápido cumpliendo sus sueños personales, porque todo su dinero se lo han dado a otros que cada día son más ricos y nunca se sacian.
A la gente que está embobada por los eventos del mundo no le queda ni tiempo para meditar que está haciendo con su vida y esto es precisamente lo que las grandes multinacionales y nacionales movilizadores de masas quieren que los ambiciosos que hay en cada país quieren, que es que LA GENTE NO MEDITE, NO PIENSE Y CORRA A LLENARLE SU BOLSILLO, AUNQUE LOS DEJEN SIN NADA NI PARA VESTIR NI COMER.
Dios nos sorprende cuando menos pensamos
© Cira Arroyo Fuentes 0/10/2019 03:28 p.m.
Si nos sentimos como secos, sin nada que aportar, sin deseos de movernos ni de hacer nada, que sólo nos dan ganas de dormir y permanecer como congelados en el tiempo, oremos y auto motivémonos con Dios, y hagamos que nuestros huesos y nuestro cuerpo se mueva, y que nos rompamos la cabeza si es necesario, aunque nos duela, pero mantengámosla viva y no en un estado de vagancia.
Levantémonos y pongamos nuestra mente a pensar, y a nuestro espíritu a meditar porque si nos esforzamos algo saldrá, debido a que nada nos cae del cielo, sino que tenemos que buscarlo en la nada, si es necesario, o inventarlo, y no importa que el mundo nos haga creer que ya todo está hecho o inventado, ... gran mentira del Diablo ... porque si luchamos y buscamos con Dios, de seguro algo nuevo encontraremos, y si no lo logramos en el momento en que queremos y Dios nos hace que tengamos paciencia para que aprendamos a saber esperar, al menos nos queda el gusto de habernos esforzado y no habernos conformado con estar caídos, tirados en el suelo y como muertos en vida haciendo nada.
Recuerda que si estamos vivos, debemos permanecer de pie, luchando y buscando siempre algo nuevo porque esto nos llena de vida y nos mueve a avanzar, aunque en el camino echemos muchas cosas a perder, pero al menos aprendemos y nos perfeccionamos para recibir con gran satisfacción ese momento en que Dios, al observar en nosotros tanto espíritu de búsqueda y tanto esfuerzo se placerá en darnos mucho más de lo que imaginamos o hemos pedido, en el momento en que menos pensamos.
Nunca debemos de perder la fe y la esperanza de hallar lo que buscamos, aunque tengamos que pisar caminos desconocidos abriendo poco a poco el camino con la ayuda de Dios, sea que la búsqueda la hagamos en nuestro interior o exterior, porque Dios es experto en hacernos descubrir ríos de agua viva hasta en los lugares más secos, porque Él es una caja de sorpresas o un hacedor de milagros que nos sorprende cuando menos pensamos.
HISTORIAS DE ELLA Y SU MAMÁ
Un taquito de ojo que he escrito con mucho amor para quienes aman leer.
Por © Cira Arroyo Fuentes 21/06/2016 07:33 p.m.
Desde pequeña escuchaba a ella decirle a sus hijos que tenían que trabajar porque la vida era muy dura y había que esforzarce, pero nunca les dijo que para poder llegar más alto tenían que estudiar, eso lo ocultó porque con desespero quería que rápido la ayudaran aportando dinero o algo de comer al hogar.
Mi mamá era viuda, con 13 hijos muy pequeños. Yo era una de las hermanas mayores, chiquita aún; pero al verla tan pobre y mayor pensé en colaborar en el hogar, así como lo hacían mis compañeros de escuela que desertaban para ayudar a sus familias.
Al terminar segundo grado, apenas aprendí a escribir, leer y operaciones básicas de matemáticas, me salí de la escuela para ayudarla y ni ella ni nadie me lo impidió.
Hacía oficios domésticos, pero no me conformé con eso porque me puse mi sombrero, blusa manga larga, pantalones y botas de hule para trabajar en el campo junto a mis hermanos(as), en la finca de la casa que gracias a Dios era muy grande, con 13 hectáreas a explotar.
Sembrábamos arroz, frijoles, maíz, café y árboles frutales. Ordeñábamos vacas que nos suplían la leche para todos en casa.
Al ser mayor de edad, como lo que producía la finca no alcanzaba y hacía falta dinero, ella me permitió buscar trabajo cerca, en una compañía que construía un proyecto hidroeléctrico y tenía trabajadores que venían de lejos: unos eran jefes, otros empleados de oficina y los demás peones.
Todos necesitaban cocineras, y como yo era experta cocinando en casa, no dudé en pedirles trabajo.
Me pusieron a prueba unos días, les encantó las ollas inmensas que les preparaba con rica comida, me decían que me quedaba exquisita, hasta se chupaban los dedos al saborearla, y sin más ni más me contrataron.
Al poco tiempo me aumentaron el sueldo y pude colaborar con más gastos de la casa y hasta ahorraba.
Compraba mi ropa para trabajar, estar en casa y la mejor para ir a la iglesia el domingo.
No gastaba en pijama porque teníamos sacos de manta que lavábamos y blanqueábamos hasta dejarlos como nuevos, y como mamá tenía maquina de cocer nos las hacía; así como vestidos, camisas, pantalones, y hasta talladores y calzones, pero como éramos tantos, nos fue enseñando a que hiciéramos nuestra ropa, pero los que eran perezosos nunca aprendieron y se les hizo más fácil dejar los sacos enteros y así se metían en ellos a dormir.
A ella le daba risa ver a los que por vagancia usaban los sacos enteros porque se enredaban y caían continuamente, lo que la hacía recordar viejos tiempos con su madre y abuela, en donde hacer usar a los hijos sacos enteros para dormir era obligado para velar por ellos en la noche, pero que protegerles de día era fácil porque aunque unos tuvieran que salir de la casa para ir a la escuela y estar unas horas lejos, sabían que regresaban temprano, con la luz del sol aún y no se atreverían a hacer de las suyas por temor a que alguien les viera, pero en la oscuridad de la noche era muy difícil verlos, por eso hacían que sus hijos(as) se metieran en estos sacos y se acostaran muy temprano a dormir para custodiarles.
Los padres más adinerados, cuyos hijos no estudiaban, tenían fincas grandes donde los mantenían observados todo el día, con su mente bien ocupada trabajando en algo, y en los ratos de ocio, les inventaban juegos o actividades para compartir con ellos y que no se aburrieran, pero las familias de escasos recursos, que con trabajos tenían una casa para vivir, no hallaban que hacer con sus hijos y les era más difícil cuidarlos.
Esa costumbre de usar sacos no sólo existía en mi familia —me decía ella, — sino en todos los hogares de los pueblos desde tiempos remotos, y nos relataba cantidad de historias chistosas que su mamá decía sucedían con esos mentados sacos en su tiempo de juventud, que era peor, porque la tradición era más estricta según la clase social a la que se pertenecía, ya que las familias más adineradas que tenían más cobijas los usaban de manta, y las más pobres de gangoche porque eran más gruesos y calientes, pero que todos se los ponían enteros, en buen estado, bordando en cada saco las iniciales o nombre de su dueño(a) y a las 6:00 p.m. mandaban a todos sus hijos al baño antes de ir a dormir porque después tenían que meterse cada uno en su saco y amarrarlo bien, ...especialmente las niñas y mujeres solteras..., porque esos sacos eran como "La Garantía de la Virginidad", ...ya que en esos tiempos los padres se levantaban de sorpresa a cualquier hora de la noche, ... diferente cada día, ...hasta varias veces, ... para rondar los cuartos y ver si todos sus hijos(as) dormían, ...y por la mañana revisaban los sacos para ver como estaban, ... y si tenían huecos o señales de maltrato había problema, ya que significaba que su dueño(a) había hecho fechorías en la noche, ... formándose gran alboroto y los padres investigaban con todos los miembros del hogar para ver por qué ese saco estaba roto, sucio o dañado.
Mamá decía que a esos sacos muchos(as) los odiaban, inclusive ella y su abuela, porque al tener que usarlos a oscuras, si a alguno(a) le daba ganas de ir al baño, se enredaba entre su saco y caía provocando un gran escándalo, que hacía que los padres y demás miembros de la familia se levantaran para ver que estaba pasando, y si la ida o venida era de verdad al baño nada pasaba, pero si agarraban a alguien con las manos en la masa, o más bien en los cuerpos, por haber dejado entrar a escondidas en su cuarto a su enamorado(a), o faltaba alguien en su cama que se había escapado por la ventana, le esperaban para cacharle al regreso de su conquista, para obligarle a casarse si es que se había jalado una torta.
Y como fueron muchos los sacos rotos y maltratados que encontraron junto con quienes les causaron esos daños, fueron gran cantidad de matrimonios que se efectuaron de manera forzada, porque muchas eran menores de edad, y la honra de las mujeres tenía que cuidarse, y también la de los hombres porque cada uno representaba el honor de cada familia, que se respetaba mucho en esa época de antaño, porque por las acciones de uno o varios miembros de un hogar juzgaban a todos, por eso cada familia se cuidaba de no adquirir mala reputación.
Mamá decía que la noche sólo era para dormir, que empezaba a las 6:00 p.m., apenas la luz del sol descendía y que el día era para estudiar, trabajar o pasear en la finca por el campo, y que para trasladarse de un lado a otro lo hacían por un camino que se había demarcado por tanto pisoteo sobre el césped y el monte, porque la gente pasaba por allí continuamente a pie, a caballo, en carretas con bueyes, ganado y otros animales, causando que siempre estuviera en mal estado y más ancho cada vez según su uso, pero que cuando llovía se llenaba de barro y pozos de agua, y los únicos que se divertían eran los chiquillos porque les encantaba chapotear y jugar en ellos, especialmente cuando los mandaban a hacer un mandado o iban a la escuela.
Ella decía que por ese sendero de antaño se construyó primero una media calle, toda mal hecha, con vueltas por todas partes, siguiendo el curso que gente sin ningún estudio, ni ningún conocimiento de topografía ni ingeniería decidieron darle, sólo dejándose llevar por el instinto de que ese trayecto era el más seguro para llegar a su destino; y aunque la gente en esa época casi no salía porque se pasaba la mayor parte de su tiempo trabajando en su casa, su finca o fincas vecinas, en algunas ocasiones tenían que salir de su finca para pasar por este camino público que les daba un verdadero dolor de cabeza usar, por el mal estado en que se encontraba porque como estaba lleno de piedras y tierra les era muy difícil caminar por allí y más aún en invierno.
Explicaba que las mujeres, especialmente las madres que tenían que lavar la ropa de la familia, sufrían porque tenían que hacerlo en el río, y a muchas les quedaba muy lejos, por lo que tenían que armarse de paciencia porque tenían que caminar por fuerza por la mala calle, ya que sólo había un río en el pueblo para usarlo todas, que era el lugar donde se resumía gran parte de su vida diaria bajo el sol, en el cuál gracias a Dios se protegían al sombrearse entre muchos árboles a la orilla del río, lo que hacía que pudieran permanecer por varias horas en ese lugar, lavando con bateas o sobre las piedras a lo largo del río, usando esa agua del río que antes era limpia y cristalina.
Ella, con picarona sonrisa, comentaba que mientras lavaban, sucedían muchas anécdotas y aventuras porque el río se tornaba como un lugar de reunión común.
Un espacio de todos, ... libre, ...en donde mujeres, chiquitas, jóvenes o adultas de varios pueblos, estaban unas lavando y otras personas acompañándolas para que no fueran solas, pero como muchos(s) no estaban haciendo nada, se armaba una camaradería tremenda entre todos(as) a lo largo del río, y aunque era un ambiente sano, siempre sucedían inesperadas escapadas de algunas, las más torteras, porque muchos hombres aprovechaban la estadía de las mujeres en el río, para darse un disimulado paseo en horas libres de trabajo o hasta en horas laborables, para ver a cuál mujer podían conquistar, unos lo hacían muy respetuosamente y le conversaban a su enamorada frente a su familia o toda la gente, pero otros se la llevaban diseque a dar un paseo a la orilla del río o por el campo, donde vivían rápidas aventuras a escondidas, ... con sólo la naturaleza como testigo, ...pero cuando la verdad salía a la luz en embarazos inesperados, aparecían por ende nuevos matrimonios forzados si es que lograban hacer que se casaran.
Así era como las mujeres conocían muchachos u hombres adultos, que calculaban muy bien la hora de estadía de ellas en el río, ya que sabían que además de lavar, muchas usaban ese tiempo para llevar una merienda, poner una sábana o mantel viejo sobre el suelo, hacer un picnic, bañarse y nadar en el río.
Era el tiempo en que la mujer casada disfrutaba junto a su esposo, si él no estaba trabajando, y con sus hijos; pero las solteras se divertían un rato, fuera a solas, con amistades o hasta enamorados, en donde todos pasaban horas no sólo lavando, sino en ocio y alegría donde compartían alimentos también.
Me decía, que el problema era que a la orilla del río, no sólo había mucha alegría, sino también gran tristeza porque al ser un lugar peligroso, aveces sucedían accidentes o se perdía alguien, fuera un niño, un joven o un adulto, a quién buscaban con gran desesperación hasta encontrarle. A muchos pudieron salvarles la vida, pero a otros no, porque se ahogaron en el río, el canal, sequías y pozas del pueblo, por eso cuando alguien desaparecía, estos eran los primeros sitios en que les buscaban porque sabían que a todos les encantaba pasear e ir a nadar por esos lugares tan libres frescos y tranquilos.
Cuando recordaba estas vivencias tristes en estos sitios sufría, pero se ponía muy orgullosa y alegre al contarnos como ella había podido salvar muchas vidas porque sabía nadar muy bien, ya que desde niña siempre había vivido cerca de muchos lugares para nadar y "era como un pez cuando estaba en el agua" porque con suma destreza volteaba boca arriba a la persona que se estaba ahogando, la sujetaba fuertemente de sus cabellos y se la ponía en la espalda, al mismo tiempo que nadaba, jalándola hacia la orilla, sin permitir que en ningún momento la otra persona se volteara o la agarrara, porque si lo hacía se podían ahogar ambas.
Decía que tuvo la gran satisfacción de salvar muchas vidas en el río, el canal, sequías y pozas; pero también gran desilusión por las veces que no pudo hacerlo porque ya era tarde, como una vez que después de horas de buscar a un niño lo vio flotando, ya fallecido sobre el río y tuvo con gran valentía que sacar su cuerpo para dárselo a su madre y que en otra ocasión tampoco tuvo tiempo de salvar a una muchacha.
Ella decía que era una experta nadadora, que siempre vio los peligros latentes de todos estos lugares con mucha agua y gran profundidad que rodeaban a todos, por eso enseñó a todos sus hijos a nadar, aunque fuera con calabazos porque como vivían muy cerca de estos sitios acuosos, temía que alguno pudiera caer en uno de ellos y ahogarse por no saber nadar.
Montaba y corría a caballo con gran destreza por todas partes, pero ninguno de sus hijos aprendió nunca a nadar ni montar tan bien como ella.
Todo el tiempo se sentía muy complacida por haber brindado primeros auxilios a muchas personas en el pueblo, tanto hermanos(as), familiares y amistades; cuando alguno se atoraba, fuera con comida, algún objeto o juguete que accidentalmente se tragaban, y con gran orgullo decía que había servido como partera a muchas mujeres que no iban al hospital en ese tiempo y que preferían dar a luz en sus casas.
Oraba siempre procurando que sus hijos y todas las personas hicieran lo mismo para que invirtieran su tiempo libre rezando, ya que ella era rezadora tanto en su pueblo como en lugares vecinos porque nunca decía que no a las personas que la invitaban a orar, y a la gente le encantaba escucharla cantar todos los coros porque tenía una voz fuerte y melodiosa.
Contaba que esos momentos de oración eran muy amenos porque además de orar, repartían a todos comida: frescos, café, pan, postres, y no podía faltar el trago geande straigh para los adultos, el guarito con cirope servido en vasos más pequeños para los jóvenes y el guarito con cirope o ponche servido en copitas bien pequeñas para los niños.
Decía que eso era lo que se acostumbraba hacer antes en los pueblos del campo y que aún hoy día se sigue realizando en muchas partes.
Ella repetía constantemente como desde chiquita le encantaba cantar y jugar, y como muy pronto, tuvo que cambiar el juego por el trabajo, por la necesidad tan grande que tenía, porque desde niña tuvo que coger café y trabajar al campo, por lo que todos los días debía de acostarse muy temprano como a las 6:00 p.m y levantarse de madrugada como a las 3:00 a.m. porque tenía que poner a cocinar maíz, molerlo, hacer tortillas y hasta tostar y moler granos de café para preparar el desayuno en el que usualmente se servía café, tortillas, queso, natilla y huevo frescos a una muy temprana hora del día.
Los trastos los lavaban con ceniza y la gente se bañaba con agua de pozo, en el río, quebradas o sequías. El servicio sanitario que en ese tiempo le llamaban escusado lo construían fuera de la casa en un pequeño aposento cerrado con tablas o latas de zinc, que en su interior tenía un hueco al cual cubrían con un asiento.
Los abuelos y padres se reunían con sus hijos a contarles cuentos, historias y leyendas que no leían sino que repetían de memoria de generación en generación o que eran inventadas por ellos mismos.
Ella decía que cuando los padres querían que sus hijos fueran obedientes las historias que les contaban eran de miedo, para que tuvieran temor y les obedecieran porque con las leyendas de sustos hacían más caso por miedo a que les saliera el hombre sin cabeza, la mano peluda, la llorona, el cadejo, etc. También les decían que si no se portaban bien el niño o niñito Dios no les traería regalos en Navidad porque eso era lo que se acostumbraba hacer desde generación tras generación desde hacía mucho tiempo, entonces obedecían.
Ese era su mundo, contando una y otra vez a todos a través del tiempo, todas las anécdotas que pasaba cuando trabajaba con sus hermanos(as) en el campo, los chistes que hacían, las canciones que cantaban, porque se daban gusto trabajando y cantando a la vez, vestidos(as) con las ropas más viejas que tenían, con pantalón y camisa de manga larga, sombrero y botas de hule para cuidarse o protegerse la piel tanto del sol como de la lluvia, pero el ambiente era muy alegre, ameno y lo único que opacaba la paz en los hogares era el licor y el cigarro que desde tiempos pasados causaba daños en las familias acarreando muchos problemas por el consumo de estas sustancias nocivas.
Ella en general se sentía muy en paz con Dios y decía que siempre había hecho de todo, que era multiusos y que asimismo era su mamá, "Un Yunque de Mujer", y que le gustaría que las mujeres de hoy fuesen aún mejor que ellas, ...dejándonos de verdad un reto bastante difícil de cumplir...porque todos los tiempos son diferentes, tienen sus propias dificultades y sus propias vivencias; y los de hoy, aunque parecen más fáciles son más difíciles por la contaminación, materialismo y libertinaje desenfrenado que existe.
Gracias a Dios que es único, perfecto, e incambiante en todo tiempo ese deseo de ella para las mujeres de hoy, cada una de acuerdo a nuestras posibilidades lo podemos cumplir porque la vida de cada mujer es única en nuestro tiempo y cada una de nosotras la vive con Dios de la mejor manera y a nuestro propio paso, no al paso de ellas ni de los demás.
Por © Cira Arroyo Fuentes 21/06/2016 07:33 p.m.
Desde pequeña escuchaba a ella decirle a sus hijos que tenían que trabajar porque la vida era muy dura y había que esforzarce, pero nunca les dijo que para poder llegar más alto tenían que estudiar, eso lo ocultó porque con desespero quería que rápido la ayudaran aportando dinero o algo de comer al hogar.
Mi mamá era viuda, con 13 hijos muy pequeños. Yo era una de las hermanas mayores, chiquita aún; pero al verla tan pobre y mayor pensé en colaborar en el hogar, así como lo hacían mis compañeros de escuela que desertaban para ayudar a sus familias.
Al terminar segundo grado, apenas aprendí a escribir, leer y operaciones básicas de matemáticas, me salí de la escuela para ayudarla y ni ella ni nadie me lo impidió.
Hacía oficios domésticos, pero no me conformé con eso porque me puse mi sombrero, blusa manga larga, pantalones y botas de hule para trabajar en el campo junto a mis hermanos(as), en la finca de la casa que gracias a Dios era muy grande, con 13 hectáreas a explotar.
Sembrábamos arroz, frijoles, maíz, café y árboles frutales. Ordeñábamos vacas que nos suplían la leche para todos en casa.
Al ser mayor de edad, como lo que producía la finca no alcanzaba y hacía falta dinero, ella me permitió buscar trabajo cerca, en una compañía que construía un proyecto hidroeléctrico y tenía trabajadores que venían de lejos: unos eran jefes, otros empleados de oficina y los demás peones.
Todos necesitaban cocineras, y como yo era experta cocinando en casa, no dudé en pedirles trabajo.
Me pusieron a prueba unos días, les encantó las ollas inmensas que les preparaba con rica comida, me decían que me quedaba exquisita, hasta se chupaban los dedos al saborearla, y sin más ni más me contrataron.
Al poco tiempo me aumentaron el sueldo y pude colaborar con más gastos de la casa y hasta ahorraba.
Compraba mi ropa para trabajar, estar en casa y la mejor para ir a la iglesia el domingo.
No gastaba en pijama porque teníamos sacos de manta que lavábamos y blanqueábamos hasta dejarlos como nuevos, y como mamá tenía maquina de cocer nos las hacía; así como vestidos, camisas, pantalones, y hasta talladores y calzones, pero como éramos tantos, nos fue enseñando a que hiciéramos nuestra ropa, pero los que eran perezosos nunca aprendieron y se les hizo más fácil dejar los sacos enteros y así se metían en ellos a dormir.
A ella le daba risa ver a los que por vagancia usaban los sacos enteros porque se enredaban y caían continuamente, lo que la hacía recordar viejos tiempos con su madre y abuela, en donde hacer usar a los hijos sacos enteros para dormir era obligado para velar por ellos en la noche, pero que protegerles de día era fácil porque aunque unos tuvieran que salir de la casa para ir a la escuela y estar unas horas lejos, sabían que regresaban temprano, con la luz del sol aún y no se atreverían a hacer de las suyas por temor a que alguien les viera, pero en la oscuridad de la noche era muy difícil verlos, por eso hacían que sus hijos(as) se metieran en estos sacos y se acostaran muy temprano a dormir para custodiarles.
Los padres más adinerados, cuyos hijos no estudiaban, tenían fincas grandes donde los mantenían observados todo el día, con su mente bien ocupada trabajando en algo, y en los ratos de ocio, les inventaban juegos o actividades para compartir con ellos y que no se aburrieran, pero las familias de escasos recursos, que con trabajos tenían una casa para vivir, no hallaban que hacer con sus hijos y les era más difícil cuidarlos.
Esa costumbre de usar sacos no sólo existía en mi familia —me decía ella, — sino en todos los hogares de los pueblos desde tiempos remotos, y nos relataba cantidad de historias chistosas que su mamá decía sucedían con esos mentados sacos en su tiempo de juventud, que era peor, porque la tradición era más estricta según la clase social a la que se pertenecía, ya que las familias más adineradas que tenían más cobijas los usaban de manta, y las más pobres de gangoche porque eran más gruesos y calientes, pero que todos se los ponían enteros, en buen estado, bordando en cada saco las iniciales o nombre de su dueño(a) y a las 6:00 p.m. mandaban a todos sus hijos al baño antes de ir a dormir porque después tenían que meterse cada uno en su saco y amarrarlo bien, ...especialmente las niñas y mujeres solteras..., porque esos sacos eran como "La Garantía de la Virginidad", ...ya que en esos tiempos los padres se levantaban de sorpresa a cualquier hora de la noche, ... diferente cada día, ...hasta varias veces, ... para rondar los cuartos y ver si todos sus hijos(as) dormían, ...y por la mañana revisaban los sacos para ver como estaban, ... y si tenían huecos o señales de maltrato había problema, ya que significaba que su dueño(a) había hecho fechorías en la noche, ... formándose gran alboroto y los padres investigaban con todos los miembros del hogar para ver por qué ese saco estaba roto, sucio o dañado.
Mamá decía que a esos sacos muchos(as) los odiaban, inclusive ella y su abuela, porque al tener que usarlos a oscuras, si a alguno(a) le daba ganas de ir al baño, se enredaba entre su saco y caía provocando un gran escándalo, que hacía que los padres y demás miembros de la familia se levantaran para ver que estaba pasando, y si la ida o venida era de verdad al baño nada pasaba, pero si agarraban a alguien con las manos en la masa, o más bien en los cuerpos, por haber dejado entrar a escondidas en su cuarto a su enamorado(a), o faltaba alguien en su cama que se había escapado por la ventana, le esperaban para cacharle al regreso de su conquista, para obligarle a casarse si es que se había jalado una torta.
Y como fueron muchos los sacos rotos y maltratados que encontraron junto con quienes les causaron esos daños, fueron gran cantidad de matrimonios que se efectuaron de manera forzada, porque muchas eran menores de edad, y la honra de las mujeres tenía que cuidarse, y también la de los hombres porque cada uno representaba el honor de cada familia, que se respetaba mucho en esa época de antaño, porque por las acciones de uno o varios miembros de un hogar juzgaban a todos, por eso cada familia se cuidaba de no adquirir mala reputación.
Mamá decía que la noche sólo era para dormir, que empezaba a las 6:00 p.m., apenas la luz del sol descendía y que el día era para estudiar, trabajar o pasear en la finca por el campo, y que para trasladarse de un lado a otro lo hacían por un camino que se había demarcado por tanto pisoteo sobre el césped y el monte, porque la gente pasaba por allí continuamente a pie, a caballo, en carretas con bueyes, ganado y otros animales, causando que siempre estuviera en mal estado y más ancho cada vez según su uso, pero que cuando llovía se llenaba de barro y pozos de agua, y los únicos que se divertían eran los chiquillos porque les encantaba chapotear y jugar en ellos, especialmente cuando los mandaban a hacer un mandado o iban a la escuela.
Ella decía que por ese sendero de antaño se construyó primero una media calle, toda mal hecha, con vueltas por todas partes, siguiendo el curso que gente sin ningún estudio, ni ningún conocimiento de topografía ni ingeniería decidieron darle, sólo dejándose llevar por el instinto de que ese trayecto era el más seguro para llegar a su destino; y aunque la gente en esa época casi no salía porque se pasaba la mayor parte de su tiempo trabajando en su casa, su finca o fincas vecinas, en algunas ocasiones tenían que salir de su finca para pasar por este camino público que les daba un verdadero dolor de cabeza usar, por el mal estado en que se encontraba porque como estaba lleno de piedras y tierra les era muy difícil caminar por allí y más aún en invierno.
Explicaba que las mujeres, especialmente las madres que tenían que lavar la ropa de la familia, sufrían porque tenían que hacerlo en el río, y a muchas les quedaba muy lejos, por lo que tenían que armarse de paciencia porque tenían que caminar por fuerza por la mala calle, ya que sólo había un río en el pueblo para usarlo todas, que era el lugar donde se resumía gran parte de su vida diaria bajo el sol, en el cuál gracias a Dios se protegían al sombrearse entre muchos árboles a la orilla del río, lo que hacía que pudieran permanecer por varias horas en ese lugar, lavando con bateas o sobre las piedras a lo largo del río, usando esa agua del río que antes era limpia y cristalina.
Ella, con picarona sonrisa, comentaba que mientras lavaban, sucedían muchas anécdotas y aventuras porque el río se tornaba como un lugar de reunión común.
Un espacio de todos, ... libre, ...en donde mujeres, chiquitas, jóvenes o adultas de varios pueblos, estaban unas lavando y otras personas acompañándolas para que no fueran solas, pero como muchos(s) no estaban haciendo nada, se armaba una camaradería tremenda entre todos(as) a lo largo del río, y aunque era un ambiente sano, siempre sucedían inesperadas escapadas de algunas, las más torteras, porque muchos hombres aprovechaban la estadía de las mujeres en el río, para darse un disimulado paseo en horas libres de trabajo o hasta en horas laborables, para ver a cuál mujer podían conquistar, unos lo hacían muy respetuosamente y le conversaban a su enamorada frente a su familia o toda la gente, pero otros se la llevaban diseque a dar un paseo a la orilla del río o por el campo, donde vivían rápidas aventuras a escondidas, ... con sólo la naturaleza como testigo, ...pero cuando la verdad salía a la luz en embarazos inesperados, aparecían por ende nuevos matrimonios forzados si es que lograban hacer que se casaran.
Así era como las mujeres conocían muchachos u hombres adultos, que calculaban muy bien la hora de estadía de ellas en el río, ya que sabían que además de lavar, muchas usaban ese tiempo para llevar una merienda, poner una sábana o mantel viejo sobre el suelo, hacer un picnic, bañarse y nadar en el río.
Era el tiempo en que la mujer casada disfrutaba junto a su esposo, si él no estaba trabajando, y con sus hijos; pero las solteras se divertían un rato, fuera a solas, con amistades o hasta enamorados, en donde todos pasaban horas no sólo lavando, sino en ocio y alegría donde compartían alimentos también.
Me decía, que el problema era que a la orilla del río, no sólo había mucha alegría, sino también gran tristeza porque al ser un lugar peligroso, aveces sucedían accidentes o se perdía alguien, fuera un niño, un joven o un adulto, a quién buscaban con gran desesperación hasta encontrarle. A muchos pudieron salvarles la vida, pero a otros no, porque se ahogaron en el río, el canal, sequías y pozas del pueblo, por eso cuando alguien desaparecía, estos eran los primeros sitios en que les buscaban porque sabían que a todos les encantaba pasear e ir a nadar por esos lugares tan libres frescos y tranquilos.
Cuando recordaba estas vivencias tristes en estos sitios sufría, pero se ponía muy orgullosa y alegre al contarnos como ella había podido salvar muchas vidas porque sabía nadar muy bien, ya que desde niña siempre había vivido cerca de muchos lugares para nadar y "era como un pez cuando estaba en el agua" porque con suma destreza volteaba boca arriba a la persona que se estaba ahogando, la sujetaba fuertemente de sus cabellos y se la ponía en la espalda, al mismo tiempo que nadaba, jalándola hacia la orilla, sin permitir que en ningún momento la otra persona se volteara o la agarrara, porque si lo hacía se podían ahogar ambas.
Decía que tuvo la gran satisfacción de salvar muchas vidas en el río, el canal, sequías y pozas; pero también gran desilusión por las veces que no pudo hacerlo porque ya era tarde, como una vez que después de horas de buscar a un niño lo vio flotando, ya fallecido sobre el río y tuvo con gran valentía que sacar su cuerpo para dárselo a su madre y que en otra ocasión tampoco tuvo tiempo de salvar a una muchacha.
Ella decía que era una experta nadadora, que siempre vio los peligros latentes de todos estos lugares con mucha agua y gran profundidad que rodeaban a todos, por eso enseñó a todos sus hijos a nadar, aunque fuera con calabazos porque como vivían muy cerca de estos sitios acuosos, temía que alguno pudiera caer en uno de ellos y ahogarse por no saber nadar.
Montaba y corría a caballo con gran destreza por todas partes, pero ninguno de sus hijos aprendió nunca a nadar ni montar tan bien como ella.
Todo el tiempo se sentía muy complacida por haber brindado primeros auxilios a muchas personas en el pueblo, tanto hermanos(as), familiares y amistades; cuando alguno se atoraba, fuera con comida, algún objeto o juguete que accidentalmente se tragaban, y con gran orgullo decía que había servido como partera a muchas mujeres que no iban al hospital en ese tiempo y que preferían dar a luz en sus casas.
Oraba siempre procurando que sus hijos y todas las personas hicieran lo mismo para que invirtieran su tiempo libre rezando, ya que ella era rezadora tanto en su pueblo como en lugares vecinos porque nunca decía que no a las personas que la invitaban a orar, y a la gente le encantaba escucharla cantar todos los coros porque tenía una voz fuerte y melodiosa.
Contaba que esos momentos de oración eran muy amenos porque además de orar, repartían a todos comida: frescos, café, pan, postres, y no podía faltar el trago geande straigh para los adultos, el guarito con cirope servido en vasos más pequeños para los jóvenes y el guarito con cirope o ponche servido en copitas bien pequeñas para los niños.
Decía que eso era lo que se acostumbraba hacer antes en los pueblos del campo y que aún hoy día se sigue realizando en muchas partes.
Ella repetía constantemente como desde chiquita le encantaba cantar y jugar, y como muy pronto, tuvo que cambiar el juego por el trabajo, por la necesidad tan grande que tenía, porque desde niña tuvo que coger café y trabajar al campo, por lo que todos los días debía de acostarse muy temprano como a las 6:00 p.m y levantarse de madrugada como a las 3:00 a.m. porque tenía que poner a cocinar maíz, molerlo, hacer tortillas y hasta tostar y moler granos de café para preparar el desayuno en el que usualmente se servía café, tortillas, queso, natilla y huevo frescos a una muy temprana hora del día.
Los trastos los lavaban con ceniza y la gente se bañaba con agua de pozo, en el río, quebradas o sequías. El servicio sanitario que en ese tiempo le llamaban escusado lo construían fuera de la casa en un pequeño aposento cerrado con tablas o latas de zinc, que en su interior tenía un hueco al cual cubrían con un asiento.
Los abuelos y padres se reunían con sus hijos a contarles cuentos, historias y leyendas que no leían sino que repetían de memoria de generación en generación o que eran inventadas por ellos mismos.
Ella decía que cuando los padres querían que sus hijos fueran obedientes las historias que les contaban eran de miedo, para que tuvieran temor y les obedecieran porque con las leyendas de sustos hacían más caso por miedo a que les saliera el hombre sin cabeza, la mano peluda, la llorona, el cadejo, etc. También les decían que si no se portaban bien el niño o niñito Dios no les traería regalos en Navidad porque eso era lo que se acostumbraba hacer desde generación tras generación desde hacía mucho tiempo, entonces obedecían.
Ese era su mundo, contando una y otra vez a todos a través del tiempo, todas las anécdotas que pasaba cuando trabajaba con sus hermanos(as) en el campo, los chistes que hacían, las canciones que cantaban, porque se daban gusto trabajando y cantando a la vez, vestidos(as) con las ropas más viejas que tenían, con pantalón y camisa de manga larga, sombrero y botas de hule para cuidarse o protegerse la piel tanto del sol como de la lluvia, pero el ambiente era muy alegre, ameno y lo único que opacaba la paz en los hogares era el licor y el cigarro que desde tiempos pasados causaba daños en las familias acarreando muchos problemas por el consumo de estas sustancias nocivas.
Ella en general se sentía muy en paz con Dios y decía que siempre había hecho de todo, que era multiusos y que asimismo era su mamá, "Un Yunque de Mujer", y que le gustaría que las mujeres de hoy fuesen aún mejor que ellas, ...dejándonos de verdad un reto bastante difícil de cumplir...porque todos los tiempos son diferentes, tienen sus propias dificultades y sus propias vivencias; y los de hoy, aunque parecen más fáciles son más difíciles por la contaminación, materialismo y libertinaje desenfrenado que existe.
Gracias a Dios que es único, perfecto, e incambiante en todo tiempo ese deseo de ella para las mujeres de hoy, cada una de acuerdo a nuestras posibilidades lo podemos cumplir porque la vida de cada mujer es única en nuestro tiempo y cada una de nosotras la vive con Dios de la mejor manera y a nuestro propio paso, no al paso de ellas ni de los demás.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)