Últimamente estoy viendo con mucha frecuencia a personas decir que se quieren ir de aquí o de allá y hasta se van a otro pueblo o país al no soportar el ambiente en que viven porque hay muchas personas que no pierden ni un momento "para estarles haciendo la vida de chorritos" y se quejan de que ya no soportan el ruido "y esto y aquello" a su alrededor.
Sólo observo, medito y pienso que aunque esta situación sea incómoda, esa jamás es la solución, sino que hay que enfrentarla con Dios resistiendo y teniendo paciencia, y buscar poner orden a la situación de alguna manera para no permitir corrupción, siendo luz en medio de la oscuridad, y luchando por lo que es bueno, leal y justo.
No hay que viajar ni irse lejos para buscar tranquilidad, tener paz y estar felices porque sintamos que en el lugar en que vivimos no somos aceptados, ni queridos ni bien recibidos, etc.
Lo mejor es ignorar y pasar por alto estas situaciones para que quienes molestan intencionalmente o no, tirando piedras y escondiendo la mano esperando una reacción de nuestra parte, se cansen de hacer el ridículo papel de tontos y seguir nosotros viviendo felices, haciendo lo que más nos gusta y en lo nuestro porque en dondequiera que vivamos o estemos, ... siempre, ... en cualquier momento, ... se pueden dar situaciones así, y nosotros no tenemos por qué andar rodando de un lado para otro "dándole gusto al Diablo, que usa a los serruchadores de piso para hacernos la vida imposible, sino "que nos valga o nos resbale lo que hagan los demás" porque en todo lugar hay piedras de tropiezo y sólo hay que tener sabiduría con Dios para esquivarlas.
Tenemos que ser realistas y entender que no estamos solos en dondequiera que estemos, y que seres humanos buenos y malos, incómodos o no, están del otro lado de la puerta de nuestra casa y en los alrededores, y los tendrás en todo lugar.
So, no hay que huir ni irse para ningún otro lugar para darle gusto a nadie, sino aprender a establecer nuestra casa, que es nuestro reino con Dios, sea pequeño o grande, hasta en medio de la cizaña porque estando nosotros protegidos por Él, sólo serán alfombra a nuestros pies 😁.
Nuestro país, nuestra casa, nuestra vida y nuestra estabilidad se cuida y se defiende con El Poder de Dios de los saqueadores, sean nacionales o extranjeros, que lo único que quieren envidiosa y egoístamente es hacernos la vida imposible para ver como nos sacan del lugar en que nacimos y vivimos para quitarnos lo nuestro y que nos marchemos; pero no hay quedarles gusto.
...SI LES ESTORVAMOS, QUE SE VAYAN ELLOS; PERO NO NOSOTROS....
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