miércoles, 13 de enero de 2021

Detrás de cada obra nueva hay un soñador imperfecto

Por © Cira Arroyo Fuentes, 13/01/2021, 8:42 p.m.        Nunca te sientas que no vales, ni que no sirves para nada porque alguien en la vida te ha dicho que eres un tonto, que nada sabes hacer bien, ni le permirtas a esas voces negativas del pasado, que te dijeron eso, quizás en tu infancia, tu juventud o hasta de adulto, ó que en el presente te dicen eso porque esas palabras o voces venenosas son basura que el mal quizo lanzarte para matarte en vida, que no creyeras en ti, y que nunca hicieras nada en tu vida.

Tampoco te menosprecies por hacer un montón de borradores, de ensuciarlo todo y hacer un mero desorden cuando creas un invento porque si de antemano reconoces que sos un soñador imperfecto, que todos somos imperfectos y que perfecto sólo es Dios, vas a tener valor de lanzarte al agua para hacer lo que anhelas o sueñas, arriesgándote a preparar, hacer o crear algo en lo que estás poniendo tu corazón, para hacer que tu cerebro piense y te surjan o fluyan las ideas, o que estás aprendiendo o buscando la forma de crear o inventar u organizar algo en lo que tienes que probar muchas cosas y hasta hacer un "despelote" que da miedo, si es necesario; pero bueno, lo importante es que la obra final quede lo mejor posible y los regueros que hagas, después los limpias o recoges.

Ese viejo dicho de que "echando a perder se aprende", es muy cierto, y muchas obras para nacer y llegar a quedar bien, dejan en el proceso muchas cosas que se echan a perder o se ensucian, y tenemos muchas veces que hacernos como niños, ensuciarnos las manos, la ropa, y hacer desorden para aprender o crear algo, sea copiándolo o haciendo algo nuevo.

Nunca debemos permitir que personas que se creen perfectas nos ultrajen y pretendan que todo esté resplandeciente y de maravilla, que no quieren que nada se ensucie, ni se desordene porque eso es estresante e imposible.

Cuando llegues a un lugar y lo veas sucio o desordenado, no critiques porque tú no sabes lo que las personas de esa casa, escuela, o lugar que sea, están haciendo, si es que no han tenido tiempo de ordenar por estar realizando un trabajo, un proyecto o un invento o nuevo, ó porque por lo que están haciendo les es imposible mantener el orden.

Recuerden que para cocinar algo, crear, limpiar y ordenar bien, se requiere de ensuciar trastos, desacomodar, subir sillas, mover adornos, cuadros etc.

Todos tenemos nuestra forma muy particular de hacer las cosas, como es en mi caso, que cuando estoy preparando, inventando o como digo yo, "preparando una nueva receta de palabras o cocinando un nuevo escrito", borro y reborro continuamente. Tacho, hago círculos flechas, etc, y si alguien ve las hojas en las que escribí dirán: ¡Qué Cira más desordenada!, ...aquí no se le entiende nada, ... esto es un completo desastre; ...pero yo si entiendo ese desorden de borrador, que al final, cuando lo paso en limpio y termino de cocinarlo queda precioso ante mis ojos y me conquista cada vez más cuando lo leo.

Cuando hago vídeos hago desastres también y tengo que borrar más de uno porque me quedan espantosos; pero no me doy por vencida, hasta que grabe uno que me quede bien o por lo menos aceptable.

Detrás de cada obra nueva hay un soñador imperfecto, que reconociendo su imperfección se atreve con valor a darle vida, ...a pesar de....

Es por esto que les digo, que no critiquen los borradores ó el desorden que un soñador o creador de una obra nueva hace en el proceso, que lo mejor es que callen y esperen siempre el resultado o la obra final, ya terminada, que es la que conquista al creador de la obra primero,  porque es esta la que sale al aire a lucirce lo mejor que puede con la ayuda de la/as personas que creyeron en sí mismas o le creyeron a Dios y le dieron vida.

 




No hay comentarios: