Por © Cira Arroyo Fuentes 12/1/2023 9:23 am
Con frecuencia veo imágenes con mensajes cortos con indirectas en las web y en las redes, para los vecinos y se denota que son personas que no soportan que otras sean diferentes a ellas, que tengan diferentes creencias y costumbres.
Con esos comentarios sólo demuestran ser personas manipuladoras que quieren que todos sean como ellas.
Por todas partes existen personas así y en los vecindarios donde la gente vive con casas muy pegadas o muy cerca, es peor porque hay mucha envidia, chisme, calumnia y como todos están tan cercanos, se escuchan muchas críticas de vecinos hablando mal de otros.
Cuando un vecino no se deja manipular, lo critican y ven como le hacen la vida imposible y le echan a todos los demás vecinos encima.
No les gusta o no toleran su forma de ser porque no son como ellos porque no salen, no comparten con los demás y gustan de llevar una vida privada y tener lo mejor que pueden según sus posibilidades y cuidarlo.
En estos lugares siempre existen personas manipuladoras que quieren gobernar y dominar a todos a su manera, tenerlos bajo su autoridad o su zapato y hacerlas bailar como monigotes o marionetas a su son: inculcarles sus costumbres, usarlas como negocio para venderles cosas, planear hacer actividades y fiestas colectivas para que todos pongan dinero y vivir de los demás, involucrarlas en un ambiente de vicio y libertinaje, etc; pero cuando se topan con vecinos diferentes a los que no les gusta mezclarse mucho con los otros, que prefieren tener una vida aparte y reservada, los cogen entre ojos y los divulgan diciendo que son unos orgullosos o pedantes, sólo porque no pueden manipularlos ni hacer con ellos lo que se les antoja.
A estas personas se les olvida que cada quien es libre de escoger sus amistades, de vivir su vida a como quiere, de cuidar lo suyo, poco o mucho porque le ha costado y merece ser respetado.
Es libre de tener autoestima, de tener y usar ropa y cosas bonitas, de tener un auto o más, de tener su casa bonita y de no permitir que nadie allane su territorio ni su casa ni que se la destruyan, y que sea así no significa que pretenda creerse más que nadie, sino cuidar lo que tiene.
Si es una persona callada, que gusta de tener privacidad, vivir aparte de los demás para evitar problemas, vivir en su espacio sin molestar ni mezclarse con nadie y buscar surgir, es su derecho.
No podemos obligar a los demás a ser como nosotros ni que nadie nos obligue tampoco a ser como ellos.
Cuando los vecinos no aceptan personas así, es su problema porque todos somos libres de ser y hacer lo que queremos, siempre y cuando respetemos a los vecinos y todas las personas, las calles, el bien común y en especial las propiedades, las casas y la vida de los demás.
Lo mejor para que en un vecindario exista paz es que cada quien esté en su casa y con su vida, ...y Dios en la de todos... porque así es como se vive en sana libertad y paz.