Aunque sientas que nadie te valora, ... valórate tú... con la certeza de que Dios es el primero que te valoró, que por eso te creó y que no eres sólo un accidente, sino una persona escogida por Dios.
Con esto te debe de bastar para tener la más alta autoestima que una persona puede tener, para vivir en esta vida, que cada vez es más difícil vivirla sin Dios porque cada vez hay más gente engañosa, interesada, calculadora, manipuladora, aventurera y corrupta, que sólo te valora o te da importancia de acuerdo a lo que les das o a lo que te pueden sacar de gratis, sin dar ni sacar nada, ni esforzarce ellas para nada a cambio.
Tú tienes que tener el carácter firme de Dios para hacer un alto con la ayuda de Él, saber o tener la seguridad de tu valor y no creer en pajaritos que te pinten en el aire los demás para aprovecharse de ti.
Valórate y haz lo correcto aunque los mundanos te digan que eres una anticuada, que no estás en nada, que te estás perdiendo de lo mejor, que la vida hay que vivirla al máximo porque sólo una vida hay, etc.
Sí, la vida hay que vivirla al máximo; pero para servirle a Dios y no al Diablo, para vivir haciendo las cosas de acuerdo a la voluntad de Dios no a la del mundo.
Si alguien no te valora por más que tu te esfuerces y le des lo mejor de ti, valórate, apréciate tú y corta de raíz con todo aquello que pretenda desvalorarte o convertirte en alguien del montón para burlarse y aprovecharse de ti.