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Nota importante
Por © Cira Arroyo Fuentes 7/12/22 9:18 PM
Los complejos, temores y negativismo que en el seno del hogar, en la familia, en el círculo de amistades o en la comunidad les inculcan unos miembros a otros, sólo por ser mayores o unos por creerse más que otros o sabe lo todo, más experimentadas, mayores, mejores y superiores, aniquilan a las personas más débiles y susceptibles desde su tierna infancia, así como a las menores o más jóvenes y sencibles.
El problema de hacerlas sentirse tontas, viejas o que no sirven para nada en todo lo que planean o van a hacer a cualquier edad que tengan, es un complejo que les limita, les encapsula y les encarcela.
Este gran conflicto lo tienen muchas personas desde que son niños y durante muchos años de su juventud o por toda su vida porque siempre en su casa constantemente escuchaban que le decían a otras personas o a ellas, que para que iban a hacer esto o aquello porque ya eran unas viejas y tontas, que esas cosas sólo las hacían los ricos o las personas pudientes que tenían un alto nivel social y que empezaban su carrera desde que eran niños, inteligentes y preparados o de una edad muy temprana; pero que ya pasando cierta edad ya no debía hacerse porque se hacía el ridículo ya que se era una persona muy vieja.
Así como vi a muchas personas pasar por situaciones así, tampoco yo me salvé porque en ese tiempo eran costumbres que se creaban en los pueblos en donde mucha gente se la pasaba siempre declarando pobreza.
Esa gran negatividad se aprendía en cadena de familia en familia y cuando yo tenía 18 años y empezaba a cantar porque me encantaba, me decían que dejara de llorar y desafinar, que iba a llover, que ya era muy vieja para comenzar a cantar, en fin, a todo lo que iba a emprender, me decían que estaba vieja o que yo no sabía ni estaba preparada para nada.
Me sembraron tanto eso en mi cabeza, como cuentos de tratos en broma para molestarme y enojarme, diciéndome que yo no podía y que ya de por sí estaba muy vieja, ... que de verdad yo me sentía desde muy joven que no serbía para nada y que era como si fuera una anciana para todo.
Esos errores tan garrafales los cometieron muchas familias desmotivadoras en el pasado y aún hoy, hay muchas que los siguen practicando porque quizás lo hacen por bromear, vacilar o por coger a alguien o a algunos de la familia como conejillo de indias para entretenerse, divertirse y burlarse; pero no se dan cuenta del daño tan profundo que le están causando a una persona, en especial si es una persona que está en su etapa de niñez y de crecimiento porque es como si a muy temprana edad le cortaran las alas al desmotivarle y llenarle de tantos complejos y temores.
El poner en práctica el negativismo en los hogares, el burlarse diciendo a otros que ya están viejos, que son feos, que son unos tontos, que no sirven para nada y el golpearles porque se enojan al no aceptarles las bromas o por pequeños errores o cualquier cosa que cometen, hacerle burla o mofa, el asustarles e intimidarles, el decirle que son brutos, ignorantes, y el no motivarles ni darle importancia a nada de lo que hacen, es como matar en vida los sueños y metas que esas personas tienen y aniquilarle sus dones y talentos.
Este estilo negativo, egoísta, ultrajante, imponente y exigente de vida en familia o en comunidad, sólo demuestra las frustaciones de los mayores o de unos sobre otros, para demostrar su enfermiza autoridad y poder qyw se nutre o sexretroalumenta suempre tebuebdo a otros comi súbditos deajo de su zapato haciendo sólo.li quw ellis quueren nada más sin dejar a kos demás en libertar de ser y hacer lo que ellos realmente desean. Estas personas frustadas como no pudieron llegar muy lejos o no pudieron alcanzar todos los sueños o metas que querían, se desquitan con personas frágiles o de las generaciones menores y no quieren que ellas lo logren tampoco por eso no soportan que nadie sea diferente a ellos, ni que quiera volar con Dios con alas propias para escaparse del redil narcisista, manipulador y negativo que no les deja ser ni hacer nada en libertad porque lo único que quieren es que todos sus familiares y amistades sean como una copia o un clon de ellos; pero no soportan que sea diferente.
Las personas que tienen vivencias negativas como estas a muy temprana edad y durante su vida, les cuesta mucho salirse de ese caparazón lleno de complejos, miedos y timidez porque les sembraron el chip de que ellas no pueden ni sirven para nada y tiene que ocurrir una fuerte experiencia de motivación extraordinaria y llena de poder en su vida para que se salgan de ese estilo de vida negativo y de esclavitud que les mal enseñaron, para pasar a un estilo de vida libre y positivo en donde le crean Dios quienes son y se autoestimen o valoren, para que dejen de creer en todas las mentiras que les inculcó el maligno usando a quien podía durante muchos años de su vida por encarcelarlas o robarles su libertad para matarles en vida e impedirles ser y hacer con Dios.
En conclusión, los complejos y temores encarcelan a las personas y no las dejan ser ni hacer nada; pero El Poder de Dios con su amor que echa fuera todo complejo y temor puede romper todas las cadenas que el maligno les halla puesto a esas personas y liberarlas, para que desde ese momento en adelante le digan adiós a esa vieja vida llena de esclavitud que por muchos años las mantuvo viviendo como huesos secos o muertos en vida, y sean ahora, ya revividas por Él Poder del Santo Espíritu de Dios, personas nuevas, con propósito, libres de ser y hacer lo que más anhelan en la vida.