Alguien ha sentido alguna vez que quiere opinar o hacer algo y se siente como amarrado, que no puede moverse, como dentro de una cápsula cerrada o un ambiente peligroso, vigilante, hostil y atacante que le rodea.
Alguien se ha sentido que es carta leída donde está, como que todo a su alrededor pareciera tranquilo, callado; pero que en el fondo está dentro de un ambiente que es como una bomba de tiempo a punto de explotar.
Alguien ha sentido que le tienen en la mira, que vigilan sus pasos para ver en que momento comete un error para tener un motivo o pretexto para hacerle daño.
Alguien a sentido, o presentido que algo o alguien a su alrededor le envidia, le odia, se burla, le calumnia, le persigue, le desea mal y se siente como con una atadura o cadena corporal a su alrededor que no le deja ser, al presentir que todo un complót se está armando o ya se ha formado a su alrededor para dañarle.
Exactamente eso mismo es lo que he sentido yo en el ambiente fuera de mi casa, en la calle y en las redes sociales; pero en El Nombre de Jesús me declaro libre de toda cadena, lazo o trampa que el maligno haya puesto en mi contra o en contra de otras personas.
Un día de estos, leyendo unos comentarios en un grupo en la red social, una persona dijo que se sentía extraña, como que algo la sofocaba o la apretaba ó le faltaba el aire, como que el ambiente fuera de su casa estaba extraño y de pronto muchas personas más expresaron lo mismo.
También he observado el ambiente y comportamiento intolerante, defensivo y atacante que muestran unas personas en la calle, y en las redes sociales al leer las opiniones sobre determinado tema que hacen los demás y en especial cuando esas opiniones son hechas por cristianos.
Como he discernido todo esto, En El Nombre de Jesús oro para que el ambiente sea abierto y protegido por Dios, fresco, sano, libre, que se sienta y se respire en él paz, libertad y sanidad corporal y espiritual.
Oro para que todas las personas podamos renovar nuestras alas y tener alas nuevas, ser libres con Dios para volar como El Águila y sentirnos con Cristo libres de todo mal, libres de ser y hacer lo que más nos gusta y nos haga felices sin sentirnos amenazados por nada ni por nadie.
En conclusión les digo que debemos orar en todo tiempo para que con Cristo seamos libres, que podamos ser y hacer nosotros y dejar a otros ser y hacer también porque estando todos unidos en un sólo Espíritu Santo con Cristo, no se le abren puertas al Diablo para que entre como león rugiente buscando a quien devorar ni que pueda encontrar servidores para hacer el mal y destruir a los demás ni a personas débiles sin Cristo para que se autodestruyan.
En El Nombre de Jesús muy personalmente me cubro y cubro a mis hijos con La Sangre de Cristo y me declaro y los declaro libres de todo mal y levanto muy en alto mi cabeza y no permito que ningún mal ni ninguna persona, ni nada nos ultraje y oro para que todas las personas sean libres con Cristo también porque si así lo creemos así viviremos, y al mal, donde está y vive Cristo con todo su poder, no le queda más remedio que salir huyendo porque donde está y vive El Espíritu de Dios hay libertad.