La virtud, la dignidad y el amor propio o la autoestima, así como el respeto, son en conjunto la identidad, esencia o valiosa base firme que nos ha dado Dios, como una piedra preciosa que nunca podemos perder, si queremos vivir en paz con Él, con nosotros y con los demás.
Si queremos tener seguridad y andar siempre con la cabeza en alto, nunca podemos perderlas y tenemos que defenderlas con uñas y dientes si es necesario porque si Dios, quien nos ama inmensamente como a la niña de sus ojos, su linaje escogido y piedra preciosa, nos las ha dado, y Él sí tiene compromiso irrompible con nosotros, nunca nos abandona, nos ama de esta manera pendiente siempre de nosotros, por contraparte, nosotros jamás podemos esperar dar y recibir menos de las personas tampoco.
Siempre debemos primero amar en todo el sentido de la palabra y con todo lo que este sentimiento abarca e incluye sea obediencia, respeto, sometimiento, etc, a Dios primero porque Él es nuestro mayor tesoro, en segundo lugar amarnos, cuidarnos y respetarnos a nosotros mismos como a un tesoro que jamás podemos perder también, manteniéndonos siempre con la cabeza en alto, virtuosos, dignos y dándonos a respetar, de tal manera que ya siendo amados por Dios y por nosotros mismos su queremos abrir nuestra vida a una pareja, tenemos que esforzarnos mutuamente para amarnos y cuidarnos los dos recíprocamente como a nuestro tesoro; pero si no es así, y esa persona que queremos dejar entrar en nuestra vida no hace ningún esfuerzo ni nos demuestra un verdadero interés y sólo quiere usarnos, hay que apartarse de inmediato y alejarla de nuestra vida.
Nuestra virtud, nuestra dignidad, nuestro respeto y nuestro amor propio son junto con Dios nuestro tesoro o bien a mantener intacto; pero si en algún momento de nuestra vida, por nuestra debilidad humana le fallamos a Dios y nos fallamos a nosotros mismos a la vez, nos caemos o nos perdemos en el camino, Dios siempre está presto a ser nuestra luz para alumbranos cuando estamos pasando por momentos difíciles, ayudarnos a que hagamos un alto en el camino o rumbo en que estamos dirigiendo nuestra vida para con su mano poderosa ayudarnos a levantarnos y sacarnos de ese pozo en que estamos a punto de caer o ya hemos caído para renovarnos y que luchemos por recobrarmos y analizar o meditar que estamos haciendo con nuestra vida, recobrar nuestra virtud, nuestra dignidad, amor propio, autoestima y respeto, para seguir adelante con la cabeza en alto por un camino correcto de nuevo aunque momentaneamente nos quedemos solos o sólo con Dios porque sólo así podremos hacer limpieza en nuestra vida para sacar de ella lo que nos ha mantenido embovados, estancados, sin fuerzas, en desesperanza, sin ánimos de vivir, que nos congela, nos atrasa y no nos permite seguir adelante ni avanzar porque no nos sirve para nada, que sólo busca manipularnos, engañarnos, perdernos, alejarnos de hacer La Voluntad de Dios, sin conducirnos a ningún puerto seguro y que sólo quiere mantenernos en un estado de espera indefinida que no nos permite seguir adelante ni avanzar.
Sólo así, tomando con valentía la decisión firme de alejarnos, despojarnos y desapegarnos de la basura que astuta y manipuladamente nos corrompe, que está llena de personas incorrectas que sólo buscan intencionalmente o no sólo utilizarnos, ensuciarnos, atrasarnos, hacernos daño, hacernos perder nuestro tiempo, dinero, fuerzas y peor aún nuestra identidad, nuestra virtud, nuestra dignidad, respeto, amor propio porque son personas enfermizamente vanidosas, ensalsadas, orgullosas, egoístas que sólo piensan en ellas y avanzar sólo ellas con los suyos y utilizar a las demás personas fuera de su círculo intocable y protegido, como si fueran objetos a usar, a las que no valoran ni les importa dañar ni atrasar con tal de pasar el tiempo desaburridos, satisfacerse y nutrirse ellas en sus más bajos placeres.
No nos dejemos apantallar por nadie que brille mucho porque no todo lo que brilla es oro y no toda persona que nombra a Dios y su ley se somete a Él y a ella ni las respeta porque muchas personas utilizan conversaciones en las que nombran a Dios y hasta versículos bíblico; pero los usan para engañar y manipular a las personas según sus fines.
Relacionarse con personas así, mundanas, inseguras, engañosas, sin el carácter firme, responsable y comprometido de Dios, sólo nos hace perder nuestro tiempo y nuestra vida porque sólo utilizan a los demás para satisfacerse en algo y hacerse más fácil y barata la vida; pero a la libre, sin compromiso alguno y en cualquier momento las dejan y punto, sin importarles para nada lo que le pase a esa persona que se le ha entregado, que le ha servido en todo y que le ha dado tiempo valioso de su vida, por eso es que el no valorarse aceptando una relación de amigovios o de juntados a la libre, es un gran riesgo porque la persona que si ama de verdad, nunca se siente segura, vive en continuo estrés, y sufrimiento constante porque estas relaciones por lo general se forman así, con una persona que si se enamora y otra que sólo está con ella para servirse de ella como si fuera un objeto para hacerse la vida fácil.
Hay muchos casos en los que se unen así y ninguno de los dos se ama y lo hacen sólo por negocio; pero lo que más se da es que uno de los se haya enamorado y el otro no.
Sólo alejándonos de personas incorrectas, que no se hacen responsables de sus actos, es que podremos renovar nuestra vida, para poder darnos la oportunidad de conocer a nuevas personas correctas, para renovar nuestro círculo de amistades y añadirlas a las viejas amistades que nos quedan, que si son y han sido siemore leales con nosotros en todo tiempo, que si nos valoran como nosotros las valoramos a ellas.
En conclusión, las personas que se aman los dos, son valientes, seguras, no se van a arriesgar a vivir a la libre porque ninguno de los dos quiere perder al otro, por eso van a querer tener una relación para siempre, como Dios manda; pero cuando en un noviazgo, una de las personas quiere casarse y la otra no, es suficiente luz roja como para parar y terminar porque si wuien ama de verdad accede a ser amigovios o juntarse, sabe de antemano que nunca tendrá paz y que por más que le ruegue a la otra persona que se casen, nunca se va a casar y dólo lo haría porque de casualidad con el tiempo se enamorara también; pero unirse así a alguien es un gra riesgo que se corre, por eso es mejor estar sólo que aceptar vivir con alguien así.
Si nosotros, somos personas firmes con Dios, debemos de tener con Él mucha sabiduría y por eso nos debemos quedar, estar y buscar a las personas que amamos y nos aman recíprocanente e ir innovando o revovando nuestro círculo de amistades, aunando a personas nuevas a las que vamos dando y nos van dando igualmente un trato amistoso recíproco porque si no es así, es mejor irse alejando de quienes no recibimos un trato recíproco, sean estas viejas o nuevas amistades y estar solo con Dios para seguir viviendo y creciendo sólo con Él porque mantener relaciones así, en el aire, sin bases firmes y comprometidas, a la libre, sin rumbo es desperdiciar nuestro tiempo, nuestra vida y botárlos a la basura.
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