Autora Cira Arroyo Fuentes, 2/10/2025, 9:56 am
Si quieres surgir en la vida no te queda otra, tienes que ser tu principal fan o seguidor, tienes que creerle a Dios y creértela para que te resbale lo que dice la gente o lo que dice el mundo.
Así cuando entres a algún lugar o haces algo tendrás seguridad y autoestima y cuando salgas a la calle, te sientas único, lindo, exitoso, brillante y que no dejes que nada ni nadie apague tu brillo.
Que no permitas que personas envidiosas, con miradas, gestos y palabras matadoras o negativas apaguen tu brillo y tu éxito.
Simplemente si te topas con alguien con este comportamiento negativo ignórale, cambia de rumbo, quita la mirada, vuelve la espalda y prosigue tu camino hacia adelante para que el diablo, que está actuando por medio de esas personas, viendo o buscando cómo te baja tu autoestima, le salga mal su plan y no pueda realizar su maligno objetivo.
Haste el tonto, loco, disimulado e ignora a personas así y sigue adelante en tu rumbo con Dios, sonriendo, feliz, positivo, exitoso,... llevándote al mundo por delante con Dios, y lógico que quien se une a tu equipo positivo, que es Pura Vida como tú, bienvenido sea a tu vida y los que no, pues diles bye bye, para que sigan su negativo camino; pero que no te echen a perder el tuyo.
Cuando vas por la calle tú vas a toparte con muchos tipos de personas y a ver un montón de gente que se sienta en los portales de sus casas a chismear.
Habrá quienes te digan elogios y quienes te digan groserías; pero tú recibe lo bueno y desecha lo malo, que te resbale.
Sólo te debe importar lo que piense Dios y lo que opines tú, que sepas que lo que estás haciendo es algo bueno.
Que tu comportamiento sea positivo, alegre, lleno de luz, de vida y de Dios.
Que sepas que lo que haces hoy es importante para Dios y para ti; pero no vivas tu vida en base a la opinión de los demás porque entonces no vas a hacer nada ya que nunca le vas a quedar bien a todos.
Recuerda que nunca vas a poder hacer lo que realmente te gusta si siempre te la pasas pensando en la opinión de los demás porque la gente es sumamente impredecible y tú no puedes hacer lo que le gusta a una persona hoy y mañaba no o mañana lo que le gusta a otra o no, etc.
Se egoísta y has lo que te guste hacer a ti y a Dios.
Qué no te importe que digan que eres un ensimismado o que hablen mal de ti porque estás viviendo tu mundo, tu vida y estás complaciéndote a ti mismo y a Dios porque al fin y al cabo, por más que te esfuerces nunca le vas a quedar bien a todos; por eso cuando puedas ayudar a los demás, ayúdalos; pero sin esperar nada a cambio.
No hagas o esperes hacer las cosas pensando en que a los demás les va a gustar porque a quien tiene que gustarle lo que estás haciendo es a ti y a Dios porque estás haciendo las cosas de acuerdo a la voluntad de Él.
Tiene que gustarte y enamorarte de lo que haces, que tú seas tu principal fan o seguidor que tú te pongas corazones, me gustas y que tú mismo te eleves, te des los patadones artísticos que necesites porque tú no necesitas ninguna patada artística de este mundo, que nadie te patee para surgir porque al único que necesitas es a Dios y su patada artística que es la que con Poder te eleva con fuerza.
Sólo necesitas automotivarte y darte tu mismo una patada artística con la fuerza de Dios para que te eleves.
Deja que Dios te eleve, díselo, permíteselo y permítetelo porque si tú no te permites elevarte nadie nunca podrás hacerlo por tí y por más que te impulsen para elevarte, si tú no sabes elevarte por ti mismo y mantenerte allí elevado con Dios, mira que te vas a caer y te vas a dar un tremendo golpe que te morirás.
Si de verdad crees que lo que haces es bueno ante Dios y todos, Tú tienes que elevarte por tus propias fuerzas con la ayuda de Dios y mantenerte ahí elevado, volando como el águila sobre todas las cosas que te quieran aplastar.
No te pongas a pensar en lo que dicen los demás porque todas las personas van a tener diferentes opiniones sobre ti y lo que haces porque lo que importa es la opinión que tengas sobre ti que es la más importante, que sepas que vales y eres valioso.
Lo que opines tú y lo que opine Dios es lo primero que todo, demuéstrate a ti mismo que lo que tú haces realmente es lo que te gusta a ti primero porque si tú consigues eso has ganado la batalla de la vida sea que veas dinero o que no lo veas, lo que importa es que tú sepas que eres tu principal fan junto con Dios.
Y aprende a conocer a tu principal enemigo que es el diablo, quien quiere derribarte de tu vuelo porque buscará ponerte personas en el camino que te ofrezcan licor, drogas, productos y comida chatarra o dañina que busquen cualquier cosa que te pueda hacer daño, perder la conciencia para que te caigas del vuelo que llevas por eso hay que aprender a ver por dónde y por medio de quién, quienes o que personas busca derribarnos el diablo.
Debemos saber que el objetivo del maligno al sumerjirnos en alcohol, drogas, alimentos dañinos y aventuras pecaminosas es hacernos perder nuestra identidad con Dios para perdernos y destruirnos.
Tenemos que tener sabiduría, ser astutos con Dios y aprender a discernir donde, con qué y mediante quiénes nos quiere destruir Satanás y apartarnos de esos lugares y personas que nos quieren enseñar costumbres corruptas y nos ofrecen sustancias dañinas.
Y jamás pretendamos ser sabios en nuestra propia opinión porque esa es la táctica que tiene el diablo para bajarnos de nuestro vuelo con Dios; por eso si queremos de verdad ser sabios tenemos que mantener la sabiduría verdadera estando conectados con Él porque al dejar de lado la opinión de Dios estamos muertos en vida y perdidos, debido a que en esta vida podemos separarnos de todo; pero jamás de Dios, si no queremos ser presas fáciles para ser destruidas por el maligno.
No podemos decirle a Dios hoy te tomo y te sigo; pero mañana no porque no me conviene sólo porque mañana me voy de fiesta o de paseo y para no estar aburrido, ni aguarle o echarle a perder el momento a nadie o ser agua fiestas planeo tomar, drogarme y aventurarme a vivir plenamente según me sienta y de con quien o quienes esté.
No podemos decirle a Dios, Ay no Dios, ahí no quiero que estés conmigo porque no quiero que veas lo que estoy haciendo, mejor te vuelvo a buscar cuando me conviene y te dejo cuando me conviene también porque las cosas no son así.
Despertemos porque Somos con Dios o no somos porque a medias Él nos vomita.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Siéntanse libres de dejar sus comentarios y sugestiones. Bendiciones